A pocos días de que se cumpla un año de la llegada del COVID-19 a la isla, un estudio señaló que las muertes asociadas a la pandemia podrían haber sido subestimadas entre el periodo de marzo a julio de 2020.
El estudio —publicado en el Centro Nacional de Información de Biotecnología— apunta a que, en dicho periodo, las muertes relacionadas a la pandemia del COVID-19 podrían haber sido el doble de las que fueron reportadas por el Departamento de Salud de Puerto Rico ya que no se contabilizó aquellas muertes indirectas que pudieron haber sido provocadas por la pandemia.
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El estudio —el cual fue dirigido por investigadores de la agencia local y del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés)— recomienda al Departamento de Salud a investigar un exceso de muertes reportadas en dicho periodo que pudieron haber sido provocadas por las restricciones impuestas para combatir el COVID-19
De acuerdo con los investigadores, en el periodo de marzo a julio de 2020, se registraron unas 225 muertes asociadas al COVID-19. De estas, 119 fueron decesos confirmadas (aquellas confirmadas mediante pruebas diagnósticas o moleculares, PCR) y 106 probables (aquella que fue reportada con evidencia clínica y epidemiológica, pero sin prueba diagnóstica).
Según el estudio, entre marzo y julio de 2020, un total de 863 muertes fueron reportadas al Centro Nacional de Estadística de Salud (NCHS) y al Departamento de Salud de Puerto Rico. De estas muertes, 638 fueron identificadas en exceso de la expectativa base para dicho periodo. En esta cifra están las 119 reportadas como confirmadas por COVID-19 y las 106 probables por el virus. Esto, de acuerdo con el estudio, deja unas 413 muertes como posibles fallecimientos adicionales relacionados al COVID-19 a las cuales se les asignó otra causa de fallecimiento.
Ante esto, los investigadores sugieren que los sistemas de monitoreo de la agencia deben incluir un análisis en torno a las muertes que ocurren relacionadas a la pandemia más allá de aquellas confirmadas o probables. “Considerar un exceso en muertes asociadas al COVID-19 podría mejorar nuestro entendimiento en torno a la cifra de muertes asociadas a la pandemia”, reza el estudio.
Por lo tanto, los investigadores además sugieren que, ante un exceso de muertes reportados en este periodo, los sistemas de monitoreo deben expandir el análisis para incluir aquellos decesos que podrían haber estado indirectamente relacionados a la pandemia.
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El estudio también señala que, durante este periodo, muchas personas evitaron acudir a un centro de salud o a un proveedor debido a las restricciones impuestas para combatir el COVID-19.
“La verificación de muertes durante una pandemia puede tomar en consideración restricciones de salud pública —como por ejemplo, los lockdowns, restricciones de viaje y la interrupción de transportación pública— y cómo esto puede afectar la habilidad de una persona a acudir a sus citas regulares para atender condiciones nuevas o crónicas”, lee el estudio.
“Funcionarios de salud pública deben considerar mejorar las campañas educativas en torno a la importancia de que las personas continúen asistiendo a sus citas médicas para evitar que sus condiciones o enfermedades se exacerben.
El estudio, además, recomienda que las agencias incluyan las muertes directas e indirectas asociadas al COVID-19 para mejorar el entendimiento y el comportamiento de la pandemia en el país.
“Realzar el monitoreo de mortalidad puede proveer información vital que ayude a supervisar la severidad y la evolución de la pandemia del COVID-19. Para esto, se puede estimar las muertes directas e indirectas asociadas al COVID-19. El monitoreo de los departamentos de salud en torno a todas las causas del exceso de muertes durante la pandemia del COVID-19 puede ayudar a los oficiales de salud pública a tomar mejores decisiones, mensajes e intervenciones para prevenir muertes adicionales”, lee el estudio.
El pasado 24 de septiembre, el Centro de Periodismo Investigativo (CPI) reveló que el gobierno no estaba investigando las muertes en exceso que podrían haber estado relacionadas indirectamente a la pandemia.