Opinión

Opinión de Rosa Seguí: El gobierno de los eslóganes vacíos

Lee aquí la columna de la representante en esta sección del Movimiento Victoria Ciudadana.

El gobierno de Puerto Rico lanzó su más reciente campaña para promover el turismo. En esta ocasión, se promociona bajo el lema de “Isla Aventura” y “EcoIsla”, lo que parecería dar la impresión de que el gobierno trabaja para conservar y proteger la naturaleza, nuestros ecosistemas y medio ambiente. Según la propaganda del gobierno, Puerto Rico es un “parque de diversiones” y en “cada rincón tiene una variedad de destinos naturales”. Sin embargo, el gobierno se ha caracterizado por destruir, vender y hasta regalar nuestros recursos naturales al mejor postor, nunca en favor del pueblo. En específico, este gobierno se ha caracterizado por su inacción en conservar las playas, las costas y los manglares y por permitir la destrucción ambiental sin remedios, incluyendo la venta de los espacios verdes y de nuestros parques cuyo valor es incalculable.

Las políticas de las administraciones PNP y PPD no han sido dirigidas hacia la conservación de nuestros recursos, de nuestros ecosistemas, por el contrario, no solo han permitido, sino que han favorecido la construcción desmedida, la contaminación del aire, de nuestros suelos, subsuelo y aguas. Ese mal llamado “desarrollo” que se concentra en destruir naturaleza, en sembrar cemento y contaminar nada tiene que ver con el desarrollo humano sostenible al que aspiramos. Se nos ha hecho creer que es mejor tener “trailers” y cemento en los manglares que conservarlos y así poder disfrutar de la protección y defensa que nos brindan contra los embates de los huracanes y las marejadas ciclónicas.

Como consecuencia de este tipo de políticas públicas hemos ido perdiendo espacios de disfrute, de descanso, de juego, de ocio. Nos han quitado hasta los parques. Uno de esos es el Parque de Borinquen, del cual ahora solo queda la esquina dedicada a Ana Roqué de Duprey. Luego que dispusieron de todo un parque, ahora lo desprecian por alegadamente ser un espacio pequeño cuando lo cierto es que es pequeño ahora, luego de su destrucción. Por eso resiste la comunidad y el pueblo, igual que con Vieques, con los Almendros, Playuela, Bahía de Jobos y muchas otras. No hay “Isla Aventura” ni “EcoIsla” que promocionar si no protegemos sus recursos y sus ecosistemas.

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