La comisionada residente, Jenniffer González Colón, reaccionó el martes, a acusaciones de candidatos del Partido Popular Democrático (PPD), sobre donaciones a su campaña.
“Qué ironía que quienes hoy levantan cuestionamientos de donativos en campañas políticas son los mismos que, en el 2009, admitieron ante un tribunal que lavaron dinero sucio como donativos ilegales políticos”, señaló la comisionada.
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Según dijo, la semana pasada se opuso públicamente al nombramiento del nominado a la Junta de Control Fiscal por un aparente conflicto de interés, “aún cuando años atrás le hizo un donativo a mi campaña”, continuó.
González sacó a relucir el caso en que personas cercanas a la entonces campaña a la gobernación de Anibal Acevedo Vilá, fueron imputados por presentar declaraciones falsas ante el FBI y el FEC, fraude electrónico y lavado de dinero.
El representante Luis Vega Ramos y el candidato a representante por acumulación, Gabriel López Arrieta, denunciaron hoy que la comisionada residente Jenniffer González ha recibido un total de $37,732.00 de fondos de campaña política, procedentes de cabilderos, asesores y suplidores de la Junta de Supervisión Fiscal y de la Autoridad de Energía Eléctrica.
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Según los datos oficiales, la actual comisionada residente recibió $2,700.00 de José Carrión III, presidente saliente de la Junta de Supervisión Fiscal, excuñado de Pedro Pierluisi, y miembro del Comité Latinos for Trump, el cual González Colón co-preside. Asimismo, González recibió $1,000.00 de Martin Bienenstock, director de la división de asuntos gubernamentales y quiebras y socio de la firma Proskauer Rose LLP, uno de los bufetes de abogados que representan a la Junta de Supervisión Fiscal en el proceso de quiebras de la isla, incluyendo, la quiebra de la AEE.
Los dirigentes populares adelantaron que hay información adicional sobre los vínculos de González y otras firmas de cabilderos, así como de grupos de intereses económicos los cuales estarán denunciando oportunamente, lo que demuestra que la comisionada residente tiene innumerables conflictos con sus allegados.
“Ya sabemos que Jenniffer González se la pasa viajando en medio de las crisis, falta a las votaciones, vota en contra para prohibir el discrimen, se niega a prohibir el uso de las fuerzas militares contra los hermanos inmigrantes y ahora, inunda sus cuentas bancarias de su campaña con dinero de asesores de la Junta y de cabilderos, suplidores y proponentes de la privatización de la AEE. No hay duda, igual que Pierluisi, las lealtades de Jenniffer están comprometidas y caducan según convenga.”, expresó finalmente Vega Ramos, quien aspira al Senado por acumulación.
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