El gobierno y el Congreso de Estados Unidos se aprestan a discutir un paquete de ayuda para la economía vapuleada por la crisis del coronavirus, pero las perspectivas de una rápida solución parecen sombrías ya que el presidente Donald Trump y los legisladores demócratas no han logrado un acuerdo.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y el jefe de despacho de la presidencia Mark Meadows se disponían a reanudar negociaciones.
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Su encuentro virtual previsto para las próximas horas sería el primer intento desde el fracaso de las negociaciones a principios de mes. En tanto, las solicitudes de seguro de desempleo llegaron al millón el jueves y los hogares tienen dificultades para lidiar con la situación.
El paquete de asistencia anterior, las protecciones contra el desalojo y la ayuda a las pequeñas empresas están a punto de caducar al tiempo que los decesos por el virus están llegando a 180.000, la cifra más alta del mundo.
“No cederemos”, dijo Pelosi en el Capitolio.
La demócrata por California dijo que esperaba que la Casa Blanca aceptara un acuerdo ahora que los demócratas redujeron su propuesta de 3.000 millones de dólares a 2.000 millones. Antes del fracaso de las negociaciones, los demócratas sugirieron que el equipo de Trump elevara su oferta de 1.000 millones a 2.000 millones, pero no hubo una contrapropuesta del gobierno.
“Van a tener que ofrecer más dinero”, dijo Pelosi.
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El legislativo está en receso hasta septiembre, y parece difícil que se convoque a los legisladores a Washington a menos que haya un acuerdo listo para la votación. Las conversaciones distan de haber alcanzado ese nivel y en realidad se están ampliando para abarcar otras necesidades como los fondos que requiere el Correo para la elección de noviembre. Además, los desastres provocados por los huracanes en Texas y Luisiana y los incendios en California también requerirán previsiblemente fondos de ayuda.
