Un hombre negro baleado varias veces, aparentemente en la espalda, por la policía en Wisconsin está paralizado de la cintura para abajo y tiene “ocho agujeros” en el cuerpo, dijo el padre de la víctima Jacob Blake.
El tiroteo del domingo a plena luz del día por la policía en Kenosha, capturado en un video de un teléfono celular que se difundió rápidamente en las redes sociales, desató nuevas protestas por la injusticia racial. Se produce tres meses después de que la muerte de George Floyd a manos de la policía de Minneapolis desencadenara manifestaciones en los Estados Unidos y provocara un ajuste de cuentas más amplio sobre la raza.
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El padre de Blake, también llamado Jacob Blake, le dijo al Chicago Sun-Times en una historia publicada el martes que no sabía si la parálisis de su hijo de 29 años sería permanente. El hombre mayor viajaba desde Carolina del Norte para estar con su hijo, quien estaba siendo tratado en un hospital de Milwaukee.
“Quiero poner mi mano en la mejilla de mi hijo y darle un beso en la frente, y luego estaré bien”, dijo el padre al periódico. “Lo besaré con mi máscara. Lo primero que quiero hacer es tocar a mi hijo “.
El padre de Blake dijo que se enteró el domingo por la noche de que los agentes le habían disparado a su hijo ocho veces y poco después vio el video, que parece mostrar a su hijo recibiendo un disparo por la espalda.
MIRA EL VÍDEO AQUÍ: **Discreción con las imágenes**