A pesar de que dueños de centros para adultos mayores han asegurado que no pueden costear la instalación de rociadores y que podrían quedar inoperantes, el Negociado del Cuerpo de Bomberos recalcó en una vista pública que deberán colocarlos, aunque se extendió a dos años el periodo para que los hogares puedan completar la nueva regulación.
“La Oficina de Gerencia de Permisos (OGPe) y el NCBPR están llamados a exigir la instalación de sistemas de rociadores automáticos contra incendios a los centros de cuidado de personas de edad avanzada, ya sea en instalaciones nuevas o existentes. Esto como medida para proteger a los ocupantes ante la ocurrencia de un fuego en tales instalaciones. En Puerto Rico, han ocurrido múltiples desgracias en instalaciones al cuidado de personas de edad avanzada”, destacaron.
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La ponencia del Negociado se leyó durante la vista de la Comisión cameral de Desarrollo Económico, Planificación, Telecomunicaciones, Alianzas Público Privadas y Energía, presidida por el representante Víctor Parés Otero.
La agencia reconoció que la instalación de los rociadores representa un alto costo para los dueños de hogares. Sin embargo, no serán eximidos de esa instalación.
En entrevista previa con Metro, la Asociación de Dueños de Centros de Cuidado de Larga Duración (ADCCLD) expuso que el costo para cada centro sería de $30,000, y muchos de ellos no tienen el volumen para costearlos.
CUD asegura permisos provisionales no son suficiente
Por otro lado, la agencia Cybernews reseñó que el Centro Unido de Detallistas (CUD) destacó la necesidad de atender la raíz del problema del nuevo Reglamento Conjunto de Permisos y las discrepancias con la Ley 161-2009, según enmendada.
“Bien por la gobernadora por brindar una mirada al grave asunto de los permisos, que lleva años torturando al sector empresarial del país. Sin embargo, lo que aquí se urge es más bien el reclamo consistente y sostenido para denunciar la mala interpretación y las diferencias diametrales con la ley”, indicó Jorge Argüelles, presidente del CUD.