Zack Scott, gerente general interino de los Mets de Nueva York, fue arrestado bajo la acusación de conducir intoxicado, horas después de asistir a un acto de recaudación de fondos en la casa de Steve Cohen, el dueño del equipo.
Scott fue detenido alrededor de las 4:15 de la madrugada del martes, en White Plains, un suburbio de Nueva York. Las autoridades lo encontraron dormido al volante de su camioneta ante un semáforo en rojo, y determinaron que estaba intoxicado, dijo el capitán James Spencer, de la policía local.
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Spencer añadió que Scott se negó a someterse a una prueba de alcoholemia.
El ejecutivo de 44 años fue liberado y deberá comparecer este jueves por la mañana ante la corte. The New York Post fue el primer medio que informó sobre el arresto.
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El club confirmó el miércoles un reporte de ESPN en el sentido de que Scott estaba en el acto de recaudación de fondos de la Fundación Amazin’ Mets, realizado el lunes por la noche en la residencia de Cohen en Connecticut. Varios peloteros asistieron también al acto.
Scott se marchó aproximadamente a las 8:30 o 9 de la noche, cuando concluyó el evento, añadió el equipo.
“Nos sorprendimos y decepcionamos profundamente al saber esta mañana sobre el cargo por conducir supuestamente intoxicado, que involucra a Zack Scott”, indicaron los Mets en un comunicado. “Nos tomamos este asunto muy en serio. Zack no viajará con el equipo a nuestra próxima gira, mientras nos informamos más y determinamos los pasos a seguir”.
Scott fue contratado como subgerente general de los Mets antes de la campaña, para trabajar bajo las órdenes de Jared Porter, su excolega y amigo cercano. Se le ascendió a gerente general interino en enero, cuando Porter fue destituido a raíz de las revelaciones de que envió imágenes y mensajes de texto sexualmente explícitos a una reportera en 2016, cuando trabajaba con los Cachorros de Chicago.
