Javier Báez anotó un jonrón en su debut con los Mets de Nueva York el sábado por la noche, un cuadrangular de dos carreras que animó al público local en el Citi Field contra los Rojos de Cincinnati.
El dos veces All-Star lanzó un lanzamiento de 1-2 del abridor Wade Miley al jardín izquierdo en la sexta entrada para su 23er jonrón de la temporada, recortando la desventaja de Nueva York a 4-3.
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Báez echó una larga mirada a su lanzamiento en el plato de bateo y tiró su bate a un lado antes de rodear las bases. Los aficionados corearon “¡Ja-vy! Ja-vy!”. Asimismo, el jonrón fue celebrado por su compañero de equipo, el boricua Francisco Lindor.
Báez fue adquirido el viernes de los Cubs de Chicago en un gran acuerdo justo antes de la fecha límite de cambios del béisbol. Nueva York también recibió al lanzador Trevor Williams y dinero en efectivo por el prospecto de jardinero Pete Crow-Armstrong.
El Mago se convirtió en el jugador número 30 que consigue un jonrón en su debut con los Mets.
El llamativo campocorto fue recibido con varias ovaciones cálidas el sábado, incluso durante las presentaciones previas al juego y hasta cuando atrapó un popup fácil para su primera oportunidad en la defensa.
Báez pasó del número 9 con los Cups al 23 con los Mets. El jardinero central Brandon Nimmo lleva el número 9 para Nueva York.
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Triunfan los Mets
Joey Votto no pudo haberse quedado más cerca. Javier Báez sí envió la pelota del otro lado.
Báez consiguió un cuadrangular en su debut con los Mets de Nueva York, quienes remontaron para imponerse 5-4 en 10 innings a los Rojos de Cincinnati.
Votto se quedó a prácticamente nada de igualar un récord de las Grandes Ligas, de ocho juegos consecutivos bateando jonrón.
Cuando los Mets estaban a un strike de la derrota, Dominic Smith bateó un sencillo que igualó la pizarra frente a Sean Doolittle en el noveno capítulo. Brandon Drury abrió la parte baja del décimo episodio con un sencillo productor ante Luis Cessa (3-2), empujado al corredor automático Kevin Pillar desde la intermedia con la carrera de la victoria.
Votto, quien llevaba siete duelos bateando al menos un cuadrangular, conectó una línea que golpeó la parte acojinada del muro del jardín derecho en el octavo inning. La esférica volvió al terreno, tras quedarse a unos cuantos centímetros (pulgadas) de pasar por encima del letrero de los 370 pies.
“Fue un buen swing”, dijo Votto. “La pasé bien en esta racha, por lo bien que ha jugado todo el equipo”.
Si la pelota se hubiera ido del otro lado, Votto habría igualado a tres peloteros que han bateado jonrón en ocho encuentros seguidos: Dale Long en 1956 con Pittsburgh; Don Mattingly en 1987 con los Yanquis, y Ken Griffey Jr. en 1993 con Seattle.
“Ha sido algo especial y lo he disfrutado”, comentó Votto, seis veces elegido al Juego de Estrellas y Jugador Más Valioso de la Liga Nacional en 2010. “Probablemente no lo volveré a hacer”.
La pelota rebotó con tanta fuerza que Votto debió conformarse con un sencillo.
El puertorriqueño Edwin Díaz (4-4) fue el pitcher ganador.
Por los Rojos, el dominicano Arístides Aquino de 2-0 con una anotada. El venezolano Eugenio Suárez de 4-1 con una anotada y tres impulsadas.
Por los Mets, el dominicano Jonathan Villar de 3-1 con una empujada. El venezolano Luis Guillorme sin turno oficial pero con una anotada. El boricua Báez de 4-1 con una anotada y dos producidas.
