Llevo varios años recorriendo el país como parte del poder ejecutivo y luego como funcionario electo del poder legislativo. En este último, llevo seis años de casa a casa y de marquesina en marquesina escuchando a la base de nuestro partido. Lo hago por dos propósitos principales: primero, porque es mi deber como funcionario electo mantener esa comunicación directa con ellos y, segundo, para conocer sus necesidades y aspiraciones de primera mano y sin intermediarios. Estas conversaciones me han dado, además de la experiencia en el servicio público, la oportunidad de defender las causas justas en las que creo en beneficio de la gente, combatir con firmeza las injusticias del gobierno del PNP y buscar consensos para impulsar legislación de avanzada.
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La calle me ha dejado muy claro que los populares, en el momento en que se encuentra el país, no buscan un candidato más o a alguien para administrar un edificio en Puerta de Tierra. Buscan un presidente que transforme y que prepare el partido para ganar.
Por eso, como presidente electo, dirigiré al Partido Popular a crear oportunidades de desarrollo para todos y todas en un Plan de Gobierno Institucional que no dependa de candidatos. Este plan debe establecer claramente nuestro interés colectivo por encima de cualquier interés personal. Un plan con lineamientos claros para combatir la corrupción y fomentar la sana administración pública, que defienda sin excusas nuestros recursos naturales en balance con el desarrollo económico, con ideas innovadoras para transformar nuestra educación pública y que defienda la UPR. Este documento también debe incluir un plan de desarrollo económico que fortalezca las pymes y microempresas de aquí para crear riqueza local, y que garantice recursos para los servicios esenciales que proveen los municipios. En fin, un plan que atienda el maltrato a menores, nuestros adultos mayores, que defienda la libertad y la dignidad del ser humano sin importar su color, sexo, creencia religiosa, orientación sexual, edad o situación económica, entre muchas cosas más. Ese es el PPD en el que yo creo.
Nuestra base quiere a un líder que convierta nuevamente al PPD en herramienta de cambio para alcanzar las aspiraciones de todos, para hacer buen gobierno y que ponga al partido en posición de ganar. Es momento de pasar de la conversación a la acción.