Una jueza federal ha bloqueado temporalmente una ley de Florida que impide que las líneas de cruceros requieran a los pasajeros demostrar que están vacunados contra el COVID-19, señalando que la ley parece ser inconstitucional y probablemente no se sostendrá en los tribunales.
La ley, promulgada en mayo por el gobernador Ron DeSantis, le impedía a las compañías de cruceros exigirle a sus pasajeros una constancia de estar vacunados. Pero la jueza federal Kathleen Williams determinó que la ley no protege la privacidad médica ni evita la discriminación contra las personas no vacunadas, pero sí parece violar los derechos de la Primera Enmienda de la compañía Norwegian Cruise Lines, escribió.
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En el fallo de casi 60 páginas emitido el domingo por la noche, la jueza señaló que Florida no había “aportado un fundamento probatorio, fáctico o jurídico válido” para prohibir el requisito de las constancias de vacunación. Norwegian ha mostrado que suspender el requisito pondrá en peligro la salud pública y podría provocar eventos de “mucha propagación” dondequiera que los pasajeros desembarquen, escribió.
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Por separado, Florida demandó a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés) para tratar de bloquear la implementación de requerimientos de vacunación federales a los cruceros. Los CDC perdieron una apelación, pero hicieron que sus directrices no fueran vinculantes, y todas las líneas de cruceros que operan en Florida han acordado seguir las instrucciones de los CDC de manera voluntaria, añadió la jueza.
Las directrices actuales de los CDC, que están en vigor hasta el 1 de noviembre, señalan que los cruceros pueden volver a navegar con una confirmación de que por lo menos 95% de los pasajeros y miembros de la tripulación están vacunados, señaló Williams.
Los demandantes son el director de salud pública Scott Rivkees y el Departamento de Salud de Florida. El procurador del estado, Pete Patterson, dijo anteriormente que la intención de la ley es evitar una invasión a la privacidad y discriminación a los pasajeros que no estén vacunados.
