Norwegian Cruise demandó al estado de Florida por una ley que prohíbe a las compañías de cruceros exigirle a sus pasajeros constancia de vacunación contra el COVID-19.
La demanda, presentada el martes un tribunal federal de Miami, acusa a la ley de poner en peligro a los pasajeros al aumentar la probabilidad de contraer el virus. Norwegian tiene programado empezar a ofrecer paseos marítimos zarpando desde Florida el 15 de agosto, exigiendo a todos los pasajeros certificados de vacunación COVID-19.
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La compañía le pidió al juez levantar la prohibición antes del 6 de agosto. La ley adoptada por Florida estipula multas de hasta 5.000 dólares por cada ocasión en que un crucero le exija prueba de vacunación a un pasajero. Norwegian denuncia que la ley viola las leyes federales y los derechos constitucionales.
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La compañía, cuyo nombre oficial es Norwegian Cruise Line Holdings o NCLH, afirma que no podrá reanudar sus cruceros en Florida a menos que la ley sea bloqueada.
“El resultado sería una pérdida irreparable y devastadora para todos, sólo para NCLH sino también para decenas de miles de pasajeros, empleados y participantes que se benefician de las operaciones de NCLH”, dice la demanda.
“La única manera en que NCLH puede mantener sus operaciones y protocolos como está planeado será abandonar totalmente el estado de Florida”, añade el litigio.
La demanda menciona como demandado al director de salud pública del estado, el doctor Scott Rivkees. Rivkees fue designado por el gobernador republicano Ron DeSantis, cuya vocera dijo que la política de la empresa de cruceros discrimina contra menores de 12 años y otros que no requieren vacunas.
