La industria de concesionarios de autos se encuentra paralizada y sufriendo perdidas millonarias ante la falta de tablillas producidas por el Gobierno de Puerto Rico, denunciaron hoy los miembros de la Asociación de Distribuidores y Concesionarios de Autos de Puerto Rico (PRADA).
“Las tablillas las fabrica Corrección (Departamento de Corrección) en los presidios y resulta que ahora lo último que nos dijeron es que se acabó el aluminio, no hay aluminio, por ende no pueden sacar tablillas y si no pueden sacar tablillas, los dealers (concesionarios de autos) no pueden vender carros y el gobierno deja de cobrar arbitrios e impuestos de patente municipal”, afirmó Carlos Vaillant, presidente de PRADA, en entrevista con Metro.
“Nuestro reclamo es uno justo para todos. En la manera que nos agilicen las tablillas para poder vender autos, más recaudo obtiene el gobierno por concepto de los pagos de los derechos de las tablillas e inscripciones, que le pueden generar cientos de miles de dólares” expresó Vaillant.
Entre los múltiples reclamos que la Asociación de Concesionarios expresó, destacaron dos principales dificultades. La primera es la limitación de inventario de tablillas regulares y especiales, como tablillas comerciales y de carga. “Esta situación, de la falta de tablillas, está generando pérdidas sustanciales a los 400 concesionarios de autos alrededor de la isla, y más aún a los pequeños dealers que no cuentan con tablillas en su inventario, por lo que se les imposibilitan poder vender autos”, indicó Gerardo Pascual, presidente de Auto Grupo y tesorero de PRADA.
La Organización también denunció la falta de implementación de la Ley Núm. 2 -2016 o la “Ley de tablilla única”. “Con esta Ley, no importa si los ciudadanos venden o cambian su auto siempre mantendrán una misma tablilla y se evitan los costos adicionales en las transacciones de compraventa o traspaso de licencias. Además, al ser el consumidor dueño de la tablilla, se ahorra el costo de una nueva al comprar un vehículo”, explicó Vaillant.
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Hasta el momento, el procedimiento de tablillas en Puerto Rico exige que al hacer un traspaso de un vehículo al nuevo dueño, se traspasa también la tablilla de ese vehículo.
“Eso crea un montón de problemas de logísticas porque como Obras Públicas está atrasado en toda su operación, qué pasa, que tienes tu automóvil y te dieron tres o cuatro multas, esas multas van a la tablilla. El concesionario toma el carro en trade-in, chequea en el sistema de Obras Públicas, aparece cero en multas y entonces yo cojo el carro y cuando lo voy a traspasar al nuevo dueño, de pronto Obras Públicas tenía un atrasado y me salieron $500 de multas. Esos $500 generalmente el dueño original no te los va a querer pagar, lo va a tener que pagar el concesionario que es lo que generalmente ocurre”, señaló Vaillant.
Dicha ley establece que en el proceso del traspaso, el propietario que vende su vehículo de motor, arrastre o semiarrastre, mantendrá la tablilla autorizada por el Departamento de Transportación y Obras Públicas para uso en otro vehículo y la persona que adquiere el vehículo en venta comprará una, de no contar con su propia tablilla, para mantener la capacidad de la Administración de Compensaciones por Accidentes de Automóviles de crear gravámenes a la tablilla del propietario del vehículo, entre otros fines.
El presidente de PRADA aseguró que en repetidas ocasiones han llevado el reclamo hasta el Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP), pero el problema aún persiste, a pesar de un compromiso expreso del actual secretario del DTOP, Carlos Contreras, de implementar dicha ley.
“Nosotros hemos estado comunicándonos con DTOP consistentemente”, afirmó Vaillant. “De hecho, tuvimos una reunión con el secretario de DTOP el año pasado (a mediados de año) donde él accedió y nos dio la razón de que eso era una ley y que él tenía ministerialmente que implementarla”.
Según el portavoz, la “Ley de tablilla única” beneficia a los distribuidores de vehículos ya que no necesitarán grandes inventarios de nuevas tablillas en sus almacenes, lo que reduce grandemente sus costos. Por otra parte, facilita el proceso de recaudos del Gobierno por las multas o infracción a los vehículos y asimismo en el Departamento de Hacienda, brindándoles herramientas para fiscalizar a los evasores contributivos de multas, ya que existiría un registro oficial del dueño de dicha tablilla.
“Lo que pedimos es que se atienda esta situación que pone en peligro a uno de los sectores económicos más importantes en la isla y que representa a miles de empleos, pero que su vez, puede ayudar al gobierno a tener una inyección económica inmediata en sus recaudos, que tanta falta hace en estos momentos” apuntó el presidente de PRADA.
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