Aguantando y ’picando’ como una auténtica Pica Power, Mónica Puig batalló hoy contra la sexta clasificada del mundo, Caroline Garcia, hasta eliminarse en la segunda ronda del US Open.
La francesa obtuvo su revancha sobre la puertorriqueña con tres sets de 6-2, 1-6, 6-4.
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La número 55 en el mundo vio como Garcia se apoderaba fácilmente del primer parcial. Garcia, además, provocó que Puig cayera en ocho errores no forzados. Aunque luchados, la francesa logró salir con victoria en cuatro games consecutivos.
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Esa fortaleza la mantuvo hasta el final, cuando Puig cometió otros dos errores no forzados que le aseguraron el set.
Otro cantar fue el segundo intento. Esta vez vimos a la puertorriqueña muy enfocada, batallando e imponiendo su juego. Puig le rompió dos de tres servicios a su oponente, y la llevó a caer en 13 errores no forzados.
Con este resultado, Puig se anota su segunda ocasión en la que llega a las mejores 64 del torneo en Nueva York. En 2014 fue la primera vez que lo logró.
En la recta final, Puig entró con mucha más confianza y Garcia comenzó determinada a no fallar en esta revancha, espinita que tenía guardada desde que perdió ante la puertorriqueña en Connecticut.
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Sin embargo, la guerra que soltaron ambas en los últimos minutos de partido fue brutal. Luego de mantenerse a la par hasta el octavo game, en el noveno el nivel mundial de Garcia y Puig salió a flote. Bolas picando exactamente en la línea, servicios potentísimos, aces y frustración camino a la recta final del encuentro se acumularon.
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Ese punto duró unos exquisitos 16 minutos de tenis de mucho calibre. La Pica Power tuvo la oportunidad de irse arriba cinco a cuatro —tuvo seis oportunidades de break point— pero no lo consiguió.
Este parcial casi dura una hora completa, pero en ningún momento las tenistas dejaron que el cansancio las dominara y continuaron batallando.
Con este resultado, ninguno de los cuatro Grand Slams (Australia, Roland Garros, Wimbledon y US Open) vio a la medallista de oro de los Centroamericanos 2018 en sus terceras rondas.
