Moscú — La Copa del Mundo del próximo año costará 600 millones de dólares más de lo que originalmente se había presupuestado, anunciaron las autoridades de Rusia.
No hubo una explicación inmediata de los organizadores o el gobierno ruso para el aumento, que fue publicado el martes en un decreto gubernamental firmado por el primer ministro Dmitry Medvedev.
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Los costos incrementaron por 34.500 millones de rublos (600 millones de dólares) para alcanzar los 678.000 millones de rublos (11.800 millones de dólares), según el decreto.
El 57,6 % de ese total sale del presupuesto federal, otro 13,6% de los gobiernos regionales, y 28,8% de “entidades legales”, una categoría que puede incluir compañías públicas y privadas.