La licenciada y la directora ejecutiva de Proyecto Matria, Amárilis Pagán Jiménez, expresó la mañana de hoy que “en una sociedad diversa, es inaudito que una senadora use su puesto y su posicionamiento público para perseguir y censurar la disidencia”. Esto tras las expresiones de la senadora Joanne Rodríguez Veve sobre una actividad de temática LGBT que posteriormente fue censurada en el Distrito T Mobile.
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“La senadora Rodríguez Veve ha demostrado una marcada tendencia a perseguir, censurar y solicitar represalias contra grupos de mujeres y personas LGBT”, dijo Enid Pérez Rodríguez, coordinadora de política pública de Matria.
“Creo que nadie puede olvidar cómo en el año 2020, antes de juramentar, ya estaba pidiendo que se investigara a Matria por nuestro trabajo a favor de una educación con perspectiva de género. Ese fue el primero de muchos eventos similares, como pedir que se investiguen los albergues por las mismas razones, señalar a activistas a favor del aborto y provocar ataques a su integridad y ahora, censurando y pidiendo censura a una actividad del mes de orgullo LGBT que convocó la organización Waves Ahead”.
La organización expresó preocupación por la manera en la que la gerencia del Distrito T Mobile reaccionó al llamado de la senadora censurando un evento que se celebraría en un lugar público y que es cobijado por el derecho a libertad de expresión. “Es importante puntualizar que, a pesar de su nombre, este espacio de actividades es parte de una corporación del Gobierno de Puerto Rico”.
Pagán expresó su preocupación con la manera en la cual agencias públicas y grupos privados permiten que grupos claramente movidos por prejuicios hacia las comunidades LGBT influyan en sus decisiones. “Estamos presenciando lo que podría ser el inicio de una era en la cual la censura y el terror son capaces de acobardar a las personas lo suficiente como para dar la espalda a lo que saben que es correcto. Porque en este caso, lo correcto era haber protegido el derecho a la libertad de expresión, haber contestado de manera asertiva las acusaciones de la senadora y sostener y honrar el acuerdo hecho para la actividad”, dijo. “Las mujeres lesbianas, hombres gays, personas bisexuales y trans son parte de nuestra sociedad y deben poder habitar los espacios públicos sin temor a censura. Las actividades con dragas, son actos artísticos. El llevar o no a niñas y niños a estas actividades es una decisión de las familias. Familias que muy bien podrían repetir el famoso eslogan del sector conservador de “a mis hijos los crío yo”. Ni la senadora, ni el Distrito T Mobile tiene el derecho a interferir con una actividad como esta y que eso haya desembocado en un cambio forzado de localidad es una desgracia para todo el país”, concluyó Pagán.