El fundador de Omegle, una plataforma que permitía a los usuarios socializar con personas desconocidas en todo el mundo, Leif K-Brooks, anunció este viernes en sus redes sociales el cierre definitivo de la entidad tecnológica tras 14 años de operaciones.
K-Brooks hizo oficial la noticia junto a un escrito que también estuvo acompañado con palabras de agradecimientos a los usuarios de la web.
PUBLICIDAD
En la despedida, el empresario detalló que la plataforma le generó “varios dolores de cabeza” debido a que los usuarios de la red eran catalogados como “personas malintencionadas”, que volvieron a Omegle “un lugar inseguro” con el paso del tiempo, generando poca confiabilidad y gastos económicos importantes para mantener el sitio web con vida.
“Lancé Omegle cuando tenía 18 años y todavía vivía con mis padres”, comenzó diciendo K-Brooks. “Cuando usabas Omegle, te colocaba aleatoriamente en un chat con otra persona y si no deseabas hablar con una persona en particular, simplemente podías finalizar el chat y pasar a otro con otra persona. Como sobreviviente de una violación infantil, era muy consciente de que cada vez que interactuaba con alguien en el mundo físico, estaba arriesgando mi cuerpo físico. Internet me dio un refugio contra ese miedo”, agregó.
Igualmente, K-Brooks expresó que hizo “todo lo posible” para resistir “ataques”, teniendo en cuenta los intereses de los usuarios de Omegle.
“Por mucho que desearía que las circunstancias fueran diferentes, el estrés y los gastos de esta lucha (junto con el estrés y los gastos existentes que implica operar Omegle y luchar contra su uso indebido) son simplemente demasiado. Operar Omegle ya no es sostenible, ni financiera ni psicológicamente”, añadió.
¿Qué era Omegle?
Fundada en 2009, Omegle era una plataforma de video chat que funcionaba de manera similar a ChatRoulette. En ella, los usuarios podían conversar con extraños de manera aleatoria mediante videochats, sin la necesidad de ser amigos o conocidos en común (ni de manera digital ni en lo personal).
Muchos usuarios abandonaron la plataforma luego de reportar “extraños” encuentros con personas. También, Omegle se vio envuelta en demandas por abuso.