Un 29 de agosto de 2013 un sarcástico y sonriente García Padilla aseguraba al País que el ahora renunciante superintendente Héctor Pesquera se quedaba en la Policía.
En aquel entonces se decía que la salida del oficial era inminente porque tenía que regresar a su empleo con el gobierno de la ciudad de Miami a cargo de la seguridad del puerto de la ciudad.
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Dos meses más tarde, Pesquera volvió a sorprender al País con su sorpresiva renuncia nocturna donde adujo razones personales.
Entonces queda la pregunta sobre el tintero ¿El tiempo le dio la razón a los rumores de pasillo?
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