Vieques se queda en el olvido a 10 años de la lucha

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Al convertir el reclamo de unos pocos en una lucha colectiva, Puerto Rico se anotó un día como hoy —hace 10 años— una de las victorias más importantes en su historia, la expulsión de la Marina de Guerra de Estados Unidos de los terrenos de la isla municipio de Vieques.

Fue un día como hoy 1ro de mayo de 2003, que el entonces presidente de Estados Unidos, George W. Bush, ordenó la salida del cuerpo militar presionado por un historial de largas protestas a las que se sumaron miles de personas en la isla grande, figuras de gran poder político en Estados Unidos y hasta celebridades que se identificaron con la causa y que incluso pasaron días en prisión por penetrar en zonas restringidas de la Marina.     

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El detonante para esta llamada sublevación de puertorriqueños contra estadounidenses tuvo su origen el 19 de abril de 1999, cuando una bomba lanzada por un avión militar, F/A-18, mató por error al guardia civil David Sanes.

La muerte de Sanes fue la gota que colmó la copa de un pueblo —de al menos 7 mil habitantes (en esa época)— que llevaba más de seis décadas protestando, sin éxito, por la salida del cuerpo castrense.

“La gente pidió la salida de la Marina desde que llegó a Vieques en 1938. Incluso se dieron asesinatos antes del de David, cuyos responsables nunca fueron procesados. Pero la muerte de David fue como un resorte que despertó el coraje de los puertorriqueños”, dijo a Metro el exalcalde de Vieques Dámaso Serrano.

“De ahí comenzó el grito de batalla ‘Ni una bomba más’ y ‘Fuera la Marina’. Recuerdo que al otro día se hizo una manifestación frente a la alcaldía a la que llegaron políticos de la isla grande”, destacó Serrano, añadiendo que la protesta sirvió para dar paso a la creación de estrategias y organizaciones para exigir la salida de la Marina.

Desobediencia civil en masa, centenares de arrestos, apoyo de diversos frentes políticos locales e internacionales lograron tres años más tarde el cometido: sacar a la Marina. No obstante, atrás quedaron una serie de estrategias que perseguían impulsar el desarrollo económico de la Isla Nena.

Hoy en día, Vieques posee los mismos problemas de la isla grande, pero de forma exagerada, aseguró a Metro el conocido activista estadounidense Robert Rabin.

De acuerdo con el también director del Fortín Conde de Mirasol, “Vieques es mucho mejor sin el bombardeo. Sin embargo, como el resto de Puerto Rico, Vieques sufre altos niveles de desempleo, de violencia doméstica, de alcoholismo, de adicción a drogas, de violencia entre los jóvenes relacionada con el tráfico de armas y drogas, y de carencia de servicios de salud”.

Según Rabin, la principal necesidad de los viequenses son los servicios médicos, particularmente para los pacientes de cáncer.

Actualmente, en la Isla Nena se registra un elevado nivel de incidencia de cáncer, 30 % mayor que el que se registra todo Puerto Rico, producto —según expertos— de los constantes bombardeos de la milicia estadounidense por más de seis décadas.

La acción es refutada por la Agencia de Sustancias Tóxicas y Registro de Enfermedades (Atsdr, siglas en inglés) que concluyó la inexistencia de vínculos entre la contaminación provocada por la Marina y la salud de los viequenses.

Uno de muchos protagonistas: “Valió la pena ir preso por Vieques. Es el empujón más grande que se le ha dado al colonialismo en Puerto Rico. Aunque tuve momentos difíciles, como la tormenta, y mi padecimiento de cáncer, la desobediencia civil le causó una crisis política a Estados Unidos”, dijo el líder independentista Rubén Berríos Martínez, quien encabezó toda una serie de protestas y la creación de un campamento que se mantuvo durante un año ininterrumpido, desde el 8 de mayo de 1999 hasta el 4 de mayo de 2000, en el cayo La Yayí. Cumplió cuatro años de cárcel.

Según Rabin, otra de las situaciones que han retrasado el progreso de Vieques ha sido la falta de atención de los alcaldes de turno y gobernadores en implantar “las guías sustentables para el desarrollo de Vieques”, un plan creado por expertos en desarrollo económico que fue oficializado en la Ley 153 por la gobernadora Sila Calderón como la política pública a seguir en la Isla Nena. 

Familia de David Sanes Extraño a mi hermano Cuando pasó lo de mi hermano, nos enteramos por las noticias en televisión. Nosotros sabíamos que él estaba trabajando ese día, pero la Marina no vino a decírnoslo inmediatamente. Estaba molesta con ellos. No quería saber de nadie. Me mataron a mi hermano. Aún conservo el tablillero  que me regaló. Me dijo que, cuando comprara el que ya tenía visto, este iba a ser el mío. Es un tablillero bien grande; está viejo, pero no lo quiero votar. Es sagrado. Me hace mucha falta David, y los medios me lo recuerdan cada año colocando su foto. Me alegro tanto de que la Marina se haya ido. Se llevó a mi hermano. Es difícil la vida sin David, han pasado 14 años y aún lo extraño. Mercedes Sanes Rodríguez Hermana de David Sanes

“Vieques perdió una enorme oportunidad en estos 10 años de desarrollar el modelo socioeconómico que convertía a los viequenses en dueños de pequeños negocios. La propuesta fue ignorada por los alcaldes y por el gobierno central porque era un plan que no permitía la corrupción”, sentenció Rabin, al tiempo que dijo no perder las  esperanzas de que este nuevo alcalde (Víctor Emeric) cambie el rumbo de la Isla Nena.