Las imágenes muestran a los hombres bajando de sus motocicletas y atacando a los tres perros de una casa, matándolos con una lanza y una ballesta, respectivamente. Una vez que los animales estaban muertos, los hombres comenzaron a levantar la valla que los separaba para obtener los restos y, se entiende, cocinarlos después, como es costumbre en el país. Con información Letra Roja
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