Emiratos Árabes Unidos registró el martes el mayor número de casos diarios de COVID-19 en meses, un repunte que se produce mientras la variante ómicron recorre el mundo y el centro turístico de Oriente Medio se prepara para recibir a hordas de turistas en las vacaciones de fin de año.
El país informó de 452 infecciones en las últimas 24 horas, incluidas dos muertes, un aumento no visto en el estado del Golfo Pérsico, altamente vacunado desde mediados de septiembre.
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Las infecciones se habían desplomado a mínimos históricos, alrededor de 50 por día, hace poco más de una semana, lo que contribuyó a que existiera la sensación de que lo peor de la pandemia ya había terminado y que la vida podía volver a la normalidad.
Sigue en vigor una orden a nivel nacional ded que la gente use mascarillas en exteriores, pero los bares y restaurantes de Dubái han estado llenos de clientes sin cubrebocas. La mayoría de los hoteles de lujo han reportado tener reservas para las vacaciones de diciembre. Cada año, las gigantescas celebraciones de Nochevieja en la ciudad atraen a miles de turistas y personas influyentes de las redes sociales que huyen del clima invernal en Europa.
A las afueras de Dubái, las instalaciones de la feria mundial en el desierto han albergado conciertos, desfiles y otras festividades para millones de visitantes. La Expo 2020 anunció esta semana que suspenderá su desfile diario y otros eventos para combatir la propagación del virus.
Emiratos cuenta con una de las tasas de vacunación más altas del mundo, y las autoridades han informado que más del 99% de los residentes elegibles han recibido al menos una dosis. El gobierno también ofrece inyecciones de refuerzo de Pfizer-BioNTech a todos los adultos.
