Los residentes de la ciudad fronteriza de Matamoros, en el norte de México, buscaban recuperarse el sábado de una noche de terror en la que fuertes tiroteos obligaron a civiles a buscar refugio.
El gobierno del estado fronterizo de Tamaulipas informó el sábado que tres hombres armados, incluido un líder del Cartel del Golfo, murieron en los enfrentamientos con la policía. También falleció una empleada municipal que aparentemente quedó atrapada en el fuego cruzado, en tanto que dos civiles y dos sospechosos resultaron heridos.
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Los pistoleros de la banda de narcotraficantes abrieron fuego después de que la policía y los soldados intentaron detener a uno de sus vehículos. La policía encontró un vehículo a prueba de balas junto con un rifle de francotirador calibre 50 en el lugar del tiroteo, que se extendió por los bulevares de la ciudad.
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Un total de cuatro presuntos hombres armados fueron arrestados en Matamoros, ubicado al otro lado del Río Grande, Brownsville, Texas.
Durante los tiroteos los pandilleros secuestraron vehículos e incendiaron algunos para bloquear carreteras, según las autoridades. Se informó de barricadas en 15 puntos de la ciudad.
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Los clientes de restaurantes y centros comerciales publicaron videos en las redes sociales de personas buscando protegerse en los pisos y detrás de las paredes durante el tiroteo del viernes por la noche.
Funcionarios del estado de Tamaulipas dijeron que el líder de la pandilla muerto era Ariel Treviño, alias “El Tigre”, quien encabezaba un temido grupo de pistoleros del Cartel del Golfo conocido como Los Escorpiones. El gobierno dijo que Treviño se desempeñó como jefe de los vigías del cartel y dirigió sus operaciones en varias comunidades fronterizas más pequeñas en el área.
Las facciones del Cartel del Golfo se han enfrentado a la policía durante años en Matamoros y sus alrededores y en la vecina ciudad de Reynosa.