El presidente de la Asociación de Maestros de Puerto Rico (AMPR), Víctor Manuel Bonilla Sánchez, hizo el lunes, un llamado a través de misivas al gobernador Pedro Pierluisi Urrutia y a los presidentes de los cuerpos legislativos para que se incluya en el lenguaje final del Proyecto de la Cámara 1003 una protección a las pensiones del magisterio activo y que se les garantice el beneficio del Seguro Social.
“La Junta de Supervisión Fiscal, el Ejecutivo y el Legislativo han llegado a unos acuerdos para aprobar el P de la C 1003 que incluiría cero recortes a los pensionados, fondos para la Universidad de Puerto Rico y los municipios a cambio de dar paso a la ley habilitadora del Plan de Ajuste de la Deuda (PAD). Lamentablemente, en este acuerdo no se incluyeron a los maestros activos dando paso, de esa forma, a la congelación de sus beneficios de retiro y convirtiéndolos en los empleados públicos que más afectados se verán por el PAD”, aseguró Bonilla Sánchez en declaraciones escritas.
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Por su parte, Sybaris Morales Paniagua, secretaria general interina de la AMPR Local Sindical, indicó que “es preocupante que en el PAD se deje desprotegido al magisterio activo que siempre ha demostrado su nivel de trabajo y, que desde el 2017, han sido ejemplo de resiliencia en todas las situaciones catastróficas vividas en el país”.
“Los maestros siempre estamos buscando una y mil formas para brindar la enseñanza en situaciones adversas. Nuestra petición está fundamentada en la realidad fáctica de que el magisterio del sistema público de enseñanza puertorriqueño tiene el salario más bajo en comparación con los estados de la nación norteamericana, además son los únicos empleados públicos que no cotizan para el Seguro Social y cuyos términos y condiciones de empleo no van a la par con la gran y encomiable labor que realizan”, explicó Morales Paniagua.
Destacó que “hay una fuga constante de maestros hacia los Estados Unidos buscando mejores salarios y condiciones de empleo, que se incrementará si las pensiones de estos trabajadores no se garantizan”.
“Es triste, pero es nuestra realidad. El magisterio puertorriqueño está muy preparado y capacitado para ejercer su labor y es por eso que de los estados vienen a Puerto Rico a reclutarlos y ofrecerles trabajo con mejores condiciones y ayudas para relocalizarlos. Además, con los sueldos de miseria, cada año son menos los jóvenes interesados en estudiar Pedagogía en las universidades del país”, añadió.
El presidente de la AMPR exigió a los dirigentes del país “que cumplan con la palabra empeñada y se acuerden de los 26 mil educadores que son pieza clave en la formación de los profesionales del futuro”.
“No abandonen al magisterio y los condenen a sufrir en plena vejez. Confiamos en el compromiso de defender el retiro de los maestros activos y una política de cero recortes para todos por igual. Queremos ver acciones concretas en favor del magisterio puertorriqueño”, concluyó.