Varios residentes de la comunidad de Ranchos Guayama se manifestaron hoy, martes, frente a la alcaldía de Salinas, reclamando a la alcaldesa Karilyn Bonilla Colón que atienda sus reclamos antes la falta de limpieza, seguridad y atención a querellas radicadas en el municipio, entre otros asuntos apremiantes.
Según el grupo de salinenses, la alcaldesa no ha atendido de forma adecuada sus reclamos sobre la reparación de carreteras municipales, limpieza de orillas de calles y vertederos clandestinos, remoción de vehículo abandonado en la vía pública, recogido de equinos, hidrantes sin agua, falta de alumbrado y de seguridad ante la ausencia de rondas policiales y atención de querellas.
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Varios de estos reclamos llevan años sin ser atendidos por la administración municipal.
De igual forma, señalaron el peligro a la salud que ha sufrido la comunidad durante años, ante la exposición a las cenizas tóxicas de carbón utilizadas como relleno en varias calles. Análisis realizados en el 2019 a estas cenizas producidas por la empresa AES y depositada en Ranchos Guayama, revelaron que las mismas contienen varios elementos tóxicos, especialmente el peligroso arsénico, cuya concentración se encontró que está 10.4 veces por encima del nivel de seguridad aceptado por la Agencia de Protección Ambiental federal (EPA por sus siglas en inglés).
Sin embargo, el municipio no tomó ninguna acción para proteger la salud y la vida de los residentes de Ranchos Guayama.
Por último, los manifestantes denunciaron la construcción de un campo de tiro en la comunidad, para el cual se ha removido gran cantidad de terreno, sin que haya constancia de que este tenga los endosos requeridos, además de que la comunidad no fue consultada.
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