La tormenta tropical Enrique, que durante el fin de semana fue el primer huracán de la temporada del Pacífico oriental, seguía perdiendo fuerza a medida que se acerca a los balnearios del extremo sur de la península de Baja California, México.
Enrique pasó por el Cabo Corrientes, en la costa suroeste de México, el domingo en la noche y comenzó a debilitarse el lunes, durante su avance por mar abierto.
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Los vientos máximos sostenidos de la tormenta bajaban de los 95 km/h (60 mph) el lunes en la noche, dijo el el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC por sus siglas en inglés).
Según la previsión, en los próximos seguirá perdiendo fuerza y “se espera que el centro de Enrique pase cerca o sobre partes del sur de la península de Baja California” el martes en la noche o a primera hora del miércoles, explicó el NHC.
Tormenta tropical Enrique se dirige a balnearios en Baja California
El lunes en la noche, el vóttice del meteoro estaba a unos 325 kilómetros (alrededor de 205 miles) al sureste de Cabo San Lucas, en el extremo sur de Baja, y avanzaba hacia el noroeste a 9 km/h (6 mph).
Por su parte, la recién formada tormenta tropical Danny llegó en la noche a la costa de Carolina del Sur, y los meteorólogos indicaron que podría generar intensas lluvias en todo el sureste de Estados Unidos al encaminarse tierra adentro.
Danny, que es la cuarta tormenta con nombre en esta temporada de huracanes del Atlántico, se formó el lunes cerca de la costa de Carolina del Sur, y tenía vientos máximos sostenidos de 65 km/h (40 mph) al ingresar a tierra apenas al norte de Hilton Head en la Isla Pritchards, indicó el NHC. Se prevé que se debilitará rápidamente sobre tierra conforme se dirige hacia el sureste, donde pasará por partes partes de Georgia, agregó.
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A las 8 de la noche, Danny se ubicaba a unos 80 kilómetros (50 millas) al suroeste de Charleston, Carolina del Sur, según el centro de huracanes. El sistema se desplaza en dirección oeste-noroeste a 26 km/h (16 mph).
La tormenta podría generar de 3 a 8 centímetros (1 a 3 pulgadas) de lluvia, con mayores cantidades en algunas áreas costeras de Georgia y Carolina del Sur. Los meteorólogos indicaron que podría haber lluvias más intensas en algunos sitios aislados, pero la región ha estado seca, lo que limita el potencial de que haya inundaciones generalizadas.
