Los edificios del Gobierno del condado Surry en Carolina del Norte, ya no podrán tener máquinas de Coca-Cola en su interior, todo porque dirigentes políticos consideran las ideologías de la empresa “muy izquierdistas”.
Según reportó WXII, comisionados del condado dijeron estar disgustados con las políticas de la sede de Coca-Cola en Atlanta, quienes se han opuesto a las nuevas leyes electorales en Georgia.
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Uno de los comisionados con más trayectoria, Eddie Harris, dijo querer que la acción en el condado de Surry haga que “otras personas hablen contra las políticas de izquierda”.
El medio confirmó a través de la compañía que están tratando de reunirse con los comisionados para llegar a un acuerdo.
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