En un esfuerzo por evitar la propagación del COVID-19 y hacer cumplir la nueva Orden Ejecutiva establecida por el gobernador Pedro Pierluisi, el Departamento de Salud (DS) a través de la Oficina de Investigaciones intervino con 16 establecimientos este fin de semana.
Las intervenciones se llevaron a cabo en los municipios de San Juan, Caguas y Aguada.
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“El llamado es a la responsabilidad social e individual para frenar el alza en los contagios a causa del virus, como se ha reflejado por las pasadas dos semanas. Mientras algunos piensan que el virus no existe o que no se van a contagiar, tenemos un grupo en intensivo, otros en ventilador luchando por sus vidas. Las personas tienen que entender que la pandemia no se ha acabado. Necesitamos con urgencia la cooperación ciudadana para detener la cadena de contagios”, sostuvo el secretario del DS, Carlos Mellado López.
En el área de Caguas se intervino con 2 Palitos Bar & Grill, El Cielo Wine & Beers, La Vergüenza, Mala Bar, Task Fé, Bolera Service Station, To Go Stores, Huachinango, Mr. Serrano, Gustos, Alacena Bistro & Market y Zam Vka.
Mientras que, en el área de San Juan se ordenó el cierre del establecimiento Bakano que opera como barra y no autorizado abrir según la Orden Ejecutiva. Asimismo, se ordenó el cierre de la farmacia Walgreens en Condado por incumplimiento con los protocolos establecidos por el DS.
Como parte de la fiscalización, los investigadores del DS también intervinieron anoche en un evento de música electrónica en el pueblo de Aguada donde habían más de 100 personas. La intervención resultó en el arresto de uno de los organizadores por parte de la Policía de Puerto Rico, quienes también, brindan apoyo durante las visitas.
El evento en Aguada, denominado “UNDRGRNDR Sessions”, se intervino con 60 personas por violación al horario establecido por el toque de queda, no usar mascarilla, aglomeración de personas y venta de bebidas alcohólicas sin los permisos requeridos por el Departamento de Hacienda (DH).
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Según se supo, el evento, a pesar de ser anunciado en Facebook, era uno de carácter secreto, ya que los interesados desconocían la dirección hasta tanto pagaban el boleto de entrada de forma electrónica a un número provisto. Una vez procesado el pago, los organizadores enviaban la dirección del evento por mensaje de texto.
El director de la Oficina de Investigaciones del Departamento, Jesús Hernández, catalogó la fiesta como un descontrol.
“Totalmente desafortunado toparnos con un evento donde claramente no había control. Logramos identificar a los organizadores del evento quien será citado ante la ley. Nos mantenemos vigilantes y vamos a continuar haciendo nuestro trabajo”, sostuvo Hernández, quien resaltó que en la actividad se identificó atletas olímpicos, personal de manufactureras, estudiantes de medicina y leyes, profesionales de salud y viajeros que debían estar en cuarentena.
Para colaborar con los esfuerzos del DS todo aquel que conozca un lugar que opera en incumplimiento de la Orden Ejecutiva pueden enviar una confidencia través del correo electrónico investigaciones@salud.pr.gov