Oreanna Myers era una joven madre de cinco hijos que vivía en Pensilvania, Estados Unidos, y que ahora protagoniza un drama que conmociona a toda su comunidad.
La joven madre de 25 años asesinó a sus cinco hijos de entre 1 y 7 años, quemó su casa y luego se quitó la vida. El ataque lo hizo mientras su esposo, Brian Bumgarner, se encontraba en un viaje laboral.
Un vecino de la pareja llamó al 911 cuando se percató que la casa estaba en llamas. La policía y los bomberos encontraron el auto de la mujer con una nota adentro dirigida a su esposo, narró el alguacil Bruce Sloan.
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Apagado el fuego, encontraron los cadáveres de los niños que presentaban impactos de bala adentro de los restos de la casa, mientras que el cuerpo de Myers estaba en el jardín del domicilio.
En las primeras indagaciones de las autoridades, han determinado que la mujer sufría de una grave depresión, que se alimentaba con las constantes ausencias de su marido, producto de su trabajo. Ella se molestaba mucho porque su marido participaba poco en la crianza de los niños.
Greenbrier County Sheriff provides update on fatal fire, talks about emotional toll https://t.co/ZO4ObPY78m
— WFXR News (@WFXRnews) December 10, 2020
Mensajes
Entre lo que se salvo, se encontraron algunos mensajes de la mujer a su esposo: “No tendrás nada a lo que regresar más que a ver un cadáver”.
En otro mensaje, la suicida aseguró que “lamento mi malvado crimen. No era lo suficientemente fuerte para luchar contra estos demonios”.