La Policía utilizó gas lacrimógeno y granadas aturdidoras para despejar a los manifestantes pro-Trump afuera del Capitolio federal antes de las 7:00 p.m., hora en que habría de comenzar un toque de queda en Washington.
La Policía se puso máscaras de gas mientras despejaba a los manifestantes de los terrenos del Capitolio. En los momentos previos, hubo violentos enfrentamientos entre la Policía y los manifestantes.
Horas antes, docenas de partidarios del presidente Donald Trump atravesaron el perímetro de seguridad y entraron en el Capitolio mientras el Congreso se reunía para confirmar la victoria presidencial del demócrata Joe Biden. Fueron vistos peleando con agentes tanto dentro como fuera del edificio.