Una trabajadora de salud en Alaska tuvo una reacción alérgica grave a una vacuna contra el COVID-19 antes de que pasaran 10 minutos de haber recibido la inyección, informaron funcionarios de salud.
Las autoridades sanitarias de Estados Unidos han advertido a los médicos que estén atentos a reacciones alérgicas raras tras recibir la vacuna fabricada por Pfizer y la alemana BioNTech. Gran Bretaña reportó algunas reacciones alérgicas similares una semana antes.
PUBLICIDAD
La trabajadora de salud que recibió la inyección en Juneau comenzó a sentirse ruborizada y con dificultad para respirar el martes, dijo la doctora Lindy Jones, directora médica de la sala de emergencias del Hospital Regional Bartlett.
La mujer fue tratada con epinefrina y otros medicamentos. Al final las autoridades determinaron que sufrió anafilaxia, una reacción alérgica grave. La mantuvieron bajo vigilancia durante la noche y luego se recuperó.
A diferencia de los casos reportados en Gran Bretaña, la mujer de Alaska no tenía antecedentes de reacciones alérgicas.