Nueva Delhi – El número de casos confirmados de coronavirus en India subió en más de 50.000 el jueves por la tercera ola de contagios en la capital, Nueva Delhi.
El Ministerio de Salud reportó además 704 decesos en las últimas 24 horas en todo el país, elevando el cómputo nacional a 124.315.
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La situación en Nueva Delhi era tensa luego de reportar un récord 6.842 nuevos casos en el último día. Su ministro principal, Arvind Kejriwal, admitió en la víspera que la ciudad estaba pasando por la tercera ola de contagios. En total, tiene más de 37.000 casos activos.
El ministerio atribuyó el repunte de los casos en Nueva Delhi a la temporada de festivales religiosos y advirtió que la situación podría empeorar por la gran cantidad de gente que abarrota los mercados para hacer compras durante esas fiestas.
El incremento de los contagios se produce mientras Nueva Delhi parece encaminarse a una ola de frio, además del rápido empeoramiento de la calidad del aire. Expertos en salud están preocupados por cómo pueden empeorar el brote las bajas temperaturas y la elevada contaminación.
Con 8,3 millones de casos confirmados de coronavirus, India es el segundo país más afectado por la pandemia por detrás de Estados Unidos.
Por otra parte, China suspendió la entrada al país de la mayoría de titulares de pasaportes extranjeros residentes en Gran Bretaña en respuesta al aumento de los casos de COVID-19 en la nación europea. La medida afecta a quienes tengan visas o permisos de residencia emitidos antes del 3 de noviembre, con la excepción de visas diplomáticos, de servicio, cortesía o C. Además, los extranjeros que visiten el país por causas urgentes podrán solicitar visas especiales.
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China ha logrado contener en gran medida la propagación de la pandemia a nivel nacional pero sigue importando casos, con otros 20 reportados el jueves. Las autoridades chinas exigen que quienes entren al país pasen una cuarentena de dos semanas.
En Camboya, el primer ministro y cuatro miembros de su gobierno estaban en cuarentena el jueves tras reunirse con el ministro de Exteriores de Hungría el mismo día que dio positivo al virus.
