Miles de israelíes protestaron el sábado en Tel Aviv contra lo que consideran una torpe respuesta del gobierno a la crisis económica causada por el coronavirus.
Los manifestantes se reunieron en un parque a orillas del mar con letreros que decían: “Están desconectados. Estamos hartos”.
PUBLICIDAD
Fue la segunda semana de protestas contra la repuesta del gobierno, que los detractores afirman que ha proveído poca ayuda y no ofrece una red de seguridad para que cientos de miles de trabajadores independientes y propietarios de negocios superen la crisis.
El lunes, el gobierno israelí aprobó una “red de seguridad” cuyo objetivo es ofrecer durante un año apoyo de desempleo a israelíes y apoyar a negocios que batallan, pero las protestas han continuado.
Otras marchas que se enfocan en oponerse al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu también se llevaron a cabo en Jerusalén y otras partes del país. La policía disparó cañones de agua contra los manifestantes que bloquearon las calles de Jerusalén.
Parecía que Israel contuvo en gran parte una primera ola de infecciones de coronavirus hace unos meses, pero una reactivación que los detractores calificaron de apresurada disparó los contagios y el país ha comenzado a imponer nuevas restricciones a las reuniones. La crisis ha golpeado a la economía y disparado el desempleo.
El número de israelíes que han muerto de COVID-19 se acerca a los 400 y los funcionarios han reportado unos 47.000 casos confirmados.