Tras jurarse amor en el altar hace cinco años, los periodistas Julio Rivera Saniel y Milly Méndez han tenido que enfrentarse a romper esquemas y estereotipos al tener que lidiar con el racismo en Puerto Rico.
En entrevista con Metro, ambos narraron sus experiencias sobre comentarios y actitudes que han experimentado desde que decidieron unir sus vidas.
“Quizás aquí en Puerto Rico no se vive el racismo con la misma intensidad que Estados Unidos con la violencia evidente que se vive allá, pero hay unas maneras evidentes que se percibe. Creo que probablemente con las nociones de ser blanco o ser negro, y que una cosa es superior a la otra”, expresó Rivera Saniel.
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Contó que en su caso precede a la relación con Méndez, ya que con frecuencia escuchaba comentarios sobre “mejorar la raza”, lo que siempre cuestionaba “como si tuviera algo que mejorar, o como si la raza estuviera dañada”. Incluso, hasta en sus propias familias han tenido que lidiar con discursos racistas y romper esos estereotipos.
El recuerdo más reciente de una experiencia de racismo de ambos tienen fue cuando fueron a rentar un auto y la persona que les atendió les preguntó si su hija era adoptada. “Creo que le pude contestar de una manera educada y creo que no lo hizo con ninguna mala intención”, expuso la periodista.
Otro recuerdo que mencionó Méndez fue cuando anunciaron su compromiso y en las redes sociales le comentaron “te vas a casar con un mono” a lo que confesó que le molestó. “Ese fue como que mi primer choque”, recordó la periodista.
Aunque en algunos casos responden en busca de educar a las personas, en los casos como ese en los que se trata de ofensas directas, prefieren no responder.
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Ambos sostuvieron que apuestan por la educación para combatirlo. “La forma en que lo podemos combatir es la educación. Decía en Radio Isla, que yo como periodista desde mi trinchera voy a aportar educando. No juzgando, educando”, expuso Méndez. Además, Rivera Saniel hizo un llamado a que en el Departamento de Educación se integre más la afrodescendencia a través de la inclusión de más personas negras y sus aportaciones, ya que la historia afrodescendiente se limita a solo hablar de la esclavitud.
La pareja ya inculca en su hija Milena valores antirracistas. Además, buscan juguetes y libros de cuentos que exalten la afrodescendencia y la hagan sentir orgullosa de sus raíces.
