La Asociación Puertorriqueña de Profesores Universitarios (APPU) exigió el miércoles, la salida inmediata del licenciado Walter Alomar y la licenciada Zoraida Buxó de la Junta de Gobierno de la Universidad de Puerto Rico.
“Desde que llegaron a la Junta de Gobierno de la UPR han estado trabajando a favor de intereses que son contrarios al desarrollo de una universidad democrática, accesible y de calidad. Ya la paciencia de los/as universitarios/as se agotó. Queremos que estos dos entes disociadores, que no han hecho otra cosa que intentar trastocar las bases de lo que debe ser la Universidad de Puerto Rico salgan de ahí de manera inmediata”, dijo Ángel Rodríguez Rivera, presidente de la APPU en comunicación escrita.
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Buxó y Alomar fueron nombrados a la Junta de Gobierno de la Universidad de Puerto Rico por el renunciante gobernador Ricardo Rosselló Nevares. Su nombramiento significó la intervención en la UPR de la política de desmantelamiento y corrupción de instituciones públicas que son importantes para el desarrollo del país.
“Alomar y Buxó han estado impulsando una agenda consistente con la visión de Rosselló y de la Junta de Control Fiscal de desmantelar la Universidad Pública. No solo nunca defendieron el presupuesto de la UPR, sino que han objetado el reclamo de los universitarios de la restitución de fondos a la UPR”, señaló el presidente de la APPU.
“El interés de estas dos personas nunca ha sido el bienestar de la UPR. Su agenda ideológica y político partidista siempre ha estado en contra de los mejores intereses de la comunidad universitaria y el país. Por eso mismo el pueblo de Puerto Rico sacó a su jefe político, Ricardo Rosselló, y por eso los vamos a sacar a ambos de la universidad”, agregó Rodríguez.
Explicó que desde la llegada de Alomar y Buxó a la Junta de Gobierno de la UPR, se han aprobado un sinnúmero de medidas que afectan negativamente su funcionamiento y producción académica. En los pasados tres años la Universidad ha tenido un aumento vertiginoso en el costo de estudios, empeoramiento de las condiciones de trabajo del sector docente y no docente y reducción en la aportación al plan médico de los/as empleados/as.
“No hay una sola política impulsada por Alomar y Buxó que resultara en una mejoría de la universidad. Cuando tuvieron la oportunidad de defender la UPR ante la Middle States Commission on Higher Education no lo hicieron, añadió Rodríguez.
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Mencionó que en el medio de la pandemia por el COVID19 la Junta de Gobierno, impulsada por Alomar y Buxó y con el voto en contra de los senadores estudiantiles y claustrales, intentaron desmantelar el Sistema de Retiro de la Universidad. La propuesta de Alomar y Buxó contemplaba la eliminación del sistema de beneficios definidos y su sustitución por uno de aportación definida. También se aprobó un aumento sustancial en los costos de las Escuelas Laboratorio de la UPR que limita grandemente el acceso a estudiantes de familias de escasos recursos y las coloca prácticamente al nivel de los costos de colegios privados.
“Estas dos personas no demuestran ninguna sensibilidad. Se intentaron aprovechar de la pandemia para impulsar medidas a espaldas de la comunidad universitaria” dijo Rodríguez.
“La renuncia de Alomar y Buxó es necesaria, pero también es fundamental que acabemos con este jueguito de sillas musicales politiqueras que tienen los partido políticos con la universidad. La universidad reclama una autonomía real y fortalecida. Esto solo lo logramos aprobando una reforma universitaria. Que los Alomar y las Buxó no regresen a la UPR sólo lo logramos sacando el control político partidista de la UPR. Por eso nos parece urgente la aprobación del P del S 1536 que está bajo la consideración del Senado de PR. De otra manera seguiremos en el mismo juego politiquero”, concluyó Rodríguez.
