Tras el cambio de educación presencial a virtual, imprimir ejercicios de práctica, explicar el material didáctico o corregir tareas se convirtió en el nuevo desafío de los padres en escuela elemental. El nuevo panorama, causado por la pandemia del Covid-19, generó un reto a nivel académico y emocional para los padres, estudiantes y maestros.
Ante la falta de vacuna y el registro constante de nuevos casos del virus, no se descarta que se mantenga la modalidad virtual para el próximo año académico.
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En 2018, el Departamento de Educación (DE) tenía una matrícula de 294 mil estudiantes versus un total de 121 mil alumnos en escuelas privadas, reportó el Instituto de Estadísticas y la Asociación de Educación Privada en Puerto Rico. Adrián y Marcela, nombres ficticios para proteger la identidad de los menores, son parte del universo de estudiantes en escuelas elementales del país.
Adrián, de 11 años, culminó su quinto grado en la escuela pública Genero Bou en Corozal. Su madre, Julimar Vázquez Cosme, de 28 años, expresó que el menor aún no domina la destreza de lectura, por lo que utilizaba los servicios de un asistente lector durante sus clases presenciales. Ante el cambio a cursos virtuales, Adrián no tuvo la asistencia.
Vázquez Cosme expresó que los maestros de Adrián basaron sus cursos en enviar trabajos vía correo electrónico o la plataforma de mensajes “Whatsapp”. Asimismo, señaló que los docentes no cumplieron con el acomodo razonable de su hijo, pues le enviaron tareas diseñadas para un niño de corriente regular. Además, la señal de internet del hogar no era óptima.
La progenitora de Adrián ajustó su rutina diaria para ayudar en la educación de su hijo, al tiempo que trabajaba. Además, solicitó tiempo extra para que su hijo entregara algunas tareas, ya que el volumen de asignaciones era muy alto. “Al comienzo nos sentíamos abacorados; que no podíamos con la situación”, manifestó Vázquez Cosme.
No obstante, considera que su hijo dominó la mayoría de las destrezas del grado, y está preparado académicamente para el próximo año escolar. Aún así, no puede precisar si estará listo emocionalmente para continuar educándose desde su hogar. El cambio repentino en el método educativo generó “conmoción y estrés” para estudiantes y docentes, advirtió la directora de educación a distancia de la Pontificia Universidad Católica, Ivette Torres Vera, en su columna: “Retos en la Educación a Distancia ante el COVID-19”, publicada en El Nuevo Día.
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Por su parte, Marcela, de 7 años, culminó su segundo grado en el colegio bilingüe CIEM Private School en Carolina. Al igual que Adrián, necesitaba acomodos razonables, ya que tiene una condición severa en la vista, dijo su progenitora Nitza E. Rodríguez Ruiz. Las clases de Marcela tampoco fueron interactivas, no hubo vídeo llamadas con los maestros; ni contacto con sus compañeros de curso, aseguró Rodríguez Ruiz, de 35 años. Señaló que la niña recibió asignaciones que no estaban diseñadas para sus necesidades visuales. Ante lo sucedido, la madre llamó a la consejera académica, “varias veces, para decirle que el acomodo razonable no me lo están dando”.
Rodríguez Ruiz pausó su vida laboral para dedicarle tiempo a la educación de su hija. Expresó que la cantidad y tipo de asignaciones, enviadas por los maestros, resultó abrumadora para la menor que, a su corta edad, padece de ansiedad. “Hemos tenido que trabajar muchos ejercicios de mindfulness y relajación”, añadió.
A pesar de los retos, Rodríguez Ruiz considera que su hija está lista emocional y académicamente para el próximo año escolar. “Van a haber lagunas [académicas], pero me parece que estos grados [elementales] son bastante repetitivos”, opinó.
Para manejar la educación virtual, ambas madres crearon espacios de estudio, en sus hogares, y recompensaron, a sus hijos, al finalizar las tareas.
La Asociación de Psicología de Puerto Rico recomienda proveer a los niños tiempo de recreación para aumentar su productividad educativa.
Maestros exponen retos de educar a distancia
Ante el cierre abrupto del sector escolar público y privado los maestros se ajustaron, en tiempo limitado, a ofrecer virtualmente sus cursos.
Como preparación para las clases en línea, el DE le ofreció computadoras y libros, a sus docentes, para la continuación de labores a distancia. “El DE abrió un espacio para que los maestros fueran a buscar los dispositivos y libros”, según David M. González González, maestro de inglés en la escuela pública Ángeles Pastor en San Juan. El educador, que atiende estudiantes de los grados kinder a segundo, expresó que, aunque recibió el dispositivo, se le dificultó su proceso de enseñanza porque la señal de internet era inestable en su hogar.
Describió su método educativo como “maestro hacia padres”. González González utilizó la plataforma de mensajes “Whatsapp” y su página “Teacher González” en la red social Facebook para comunicarse con los padres de sus estudiantes, publicar material educativo y asignaciones. Asimismo, recibía los trabajos, de sus alumnos, a través de correo electrónico.
No obstante, expresó que, mediante la modalidad virtual, sólo se contactó con 47 del total de estudiantes matriculados en sus cursos. “Me sentía preocupado en el sentido de cómo iba a llegar a los 86 estudiantes que yo atiendo. No logré comunicarme con todos”, comentó.
El docente, quien también educa a menores con problemas específicos de aprendizaje, señaló que no tener acceso a todos sus estudiantes, durante este semestre, causará un retraso académico en las destrezas de inglés requeridas para pasar al próximo grado escolar. “Siento la responsabilidad de que ellos merecían más para poder sobrepasar el semestre”, afirmó el vegalteño de 21 años.
El maestro señaló que los estudiantes sólo contaron con un mes de cursos presenciales ya que el semestre, en el plantel, comenzó el lunes, 10 de febrero, tras los sismos de enero.
Ante la incertidumbre de cómo se impartirá el próximo año escolar, el educador avaló continuar la modalidad virtual para evitar contagios de COVID-19 entre los estudiantes de nivel elemental. Igualmente, exhortó al DE a distribuir computadoras y materiales a los alumnos.
Por su parte, Vivian Acevedo Colón, maestra de primer grado en el colegio privado “Taller Creativo”, en Caguas, calificó el cambio a educación virtual, como desafiante. “Ha sido retante a nivel profesional porque hemos tenido que ser bien creativos para ofrecer los cursos a los estudiantes. Hemos tenido que establecer horarios para las consultas con los padres, crear recibos de trabajo y evidencia de las notas [de los menores]”, explicó.
Recordó que, antes de la orden de aislamiento, ya los padres contaban con libros de los cursos en formato electrónico. Los padres pagan por una licencia de tecnología que les permite accederlos en línea”, aseguró.
El proceso de enseñanza de Acevedo Colón consistió en grabar y compartir sus cursos a los estudiantes. Además, expresó que incluyó el arte en todas sus clases para atraer la atención, y avivar la creatividad de sus alumnos.
La maestra de 39 años mostró su desacuerdo con la decisión que tomó el secretario de Educación, Eligio Hernández Pérez, de que todos los estudiantes, del sector público, pasaran de grado. “Los pasaron de grado sin destrezas [académicas] y [sin] cerciorarse de que los estudiantes están preparados para el próximo año escolar”, señaló la cagüeña.
Hernández Pérez indicó que se utilizarán los meses de agosto a octubre para reforzar las destrezas académicas del pasado semestre. Aunque comunicó que el próximo año escolar comenzará el lunes, 3 de agosto, aún no se precisa si el regreso será de forma presencial o virtual.
Recomendaciones de una psicóloga
La psicóloga clínica Ibelis Rodríguez Cosme expresó que el cambio repentino de clases presenciales, a la modalidad virtual, puede afectar la salud mental de estudiantes, padres y maestros.
Advirtió que los menores pueden presentar estresores como frustración, ansiedad, cambios en la rutina del sueño y alimentación. Señaló que los padres deben observar las conductas de sus hijos para identificar si se han afectado emocionalmente.
“Los niños con depresión se manifiestan con coraje, se tornan rebeldes, tienen cambios repentinos en sus conductas y estados de ánimo”, explicó Rodríguez Cosme. Exhortó a los padres a dialogar con sus hijos y evaluar si necesitan asistencia profesional.
La experta en salud mental sugirió implementar, en el hogar, una rutina parecida a la del plantel escolar. “Es importante que [los niños] se acuesten temprano, se levanten temprano, que desayunen y almuercen, hagan sus tareas durante el día, y luego tengan tiempo libre”, comentó.
Enfatizó que mantener la estructura será beneficioso para salvaguardar la salud emocional de los estudiantes de educación especial. “Con autismo y déficit de atención, la estructura es bien importante. La rutina se debe escribir y ponerla en alguna parte de la casa, pues a los niños les da sentido de control, y les ayudará a bajar los niveles de ansiedad”, explicó Rodríguez Cosme.
La profesional sugirió utilizar aplicaciones educativas para complementar las tareas académicas.
Si el próximo semestre escolar se ofrece en línea, la psicóloga recomendó que el DE atienda las necesidades individuales de los estudiantes, y accionar desde la empatía. “Ha faltado la agilidad de buscar estrategias, y escuchar las necesidades de los ciudadanos”, expresó.
Asimismo, exhortó a padres, docentes y DE a establecer un plan de acción que asegure un próximo año escolar fructífero. “Deben ir preparándose, en estos próximos meses, para estar listos. Tenemos la ventaja de que ya vivimos la experiencia [de educación virtual], ya sabemos lo que funciona y lo que no”, puntualizó la psicóloga.
Algunas plataformas de educación online gratuitas:
- 99 Math: Videojuegos para mejorar las destrezas matemáticas. Se accede a través de internet.
- Bit by Bit: Videojuegos de rompecabezas que fortalecen las habilidades de pensamiento lógico y solución de problemas. Disponible para descargar en IOS, Android y Amazon.
- CodeMonkey: Cursos educativos para estudiantes de kindergarten a noveno grado. Disponible para accesar en el sitio web, IOS y Android.
- Eduten Playground: Juegos en línea para que los niños practiquen matemáticas. Los padres deben crear una cuenta de usuario para que sus menores accedan a las destrezas previamente seleccionadas por los maestros.
Este reportaje es producto del trabajo final del curso Redacción Periodística II impartido por el profesor Mario Roche Morales en la Escuela de Comunicación de la Universidad de Puerto Rico, recinto de Río Piedras.