Una auditoría de la Contraloría de Puerto Rico sobre operaciones de los sistemas de información computadorizados de la Autoridad de Carreteras y Transportación de Puerto Rico reveló que la entidad pagó más de medio millón de dólares por una aplicación que no tiene ninguna utilidad.
Una opinión cualificada se emite cuando los incumplimientos individuales o en conjunto son significativos, pero no generalizados.
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El Informe revela que la Autoridad había pagado $542,691, por la aplicación e implementación del programa AvantGard Integrity sin ninguna utilidad. Luego de tres años desde la firma del contrato en el 2014, la Autoridad no utilizaba la aplicación Integrity porque no había recibido los adiestramientos y procedió a cancelar el contrato. Esta situación le impidió a la Oficina de Tesorería de la Autoridad, el tener en operación un sistema para realizar las transacciones automatizadas que conectara las inversiones con las necesidades bancarias diarias.
La auditoría de dos hallazgos señala también, que el 55% de las facturas emitidas por la compañía por el contrato del programa Integrity, carecían de la certificación requerida. La reglamentación dispone que las facturas de los contratistas deben contener la información de que ningún empleado de la Autoridad tiene intereses en las ganancias producto del contrato, que el importe es correcto y que los servicios fueron prestados y los mismos no han sido pagados.
Este Informe, segundo y último de la Autoridad, cubre el periodo del 1 de enero de 2014 al 15 de septiembre de 2017 y está disponible en www.ocpr.gov.pr.
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