Corea del Sur impuso de nuevo una serie de restricciones ante el nuevo brote de casos de coronavirus (COVID-19), que podría echar por tierra sus logros en la contención de la pandemia.
El país, considerado como uno de los ejemplos en la lucha contra la enfermedad, anunció el jueves su mayor aumento de casos en casi dos meses.
PUBLICIDAD
Las autoridades señalaron 79 nuevos contagios, la mayoría en la zona metropolitana de Seúl. De ellos, 69 se produjeron en personas que frecuentaron un almacén de la compañía de comercio electrónico Coupang, en Bucheon, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Corea.
“Creemos que el número de nuevos casos vinculados al almacén seguirá subiendo mientras terminamos las pruebas“, dijo el viceministro de Salud, Kim Gang-lip.
Este repunte de contagios obligó a las autoridades a endurecer las consignas sanitarias, que habían sido suavizadas el 6 de mayo.
Dos semanas
El ministro de Salud Park Neung-hoo dijo que museos, parques y galerías de arte volverán a cerrar el viernes durante dos semanas, e instó también a las empresas a proponer medidas de flexibilización del trabajo.
“Hemos decidido endurecer todas las medidas de cuarentena en la zona metropolitana durante dos semanas“.
A finales de febrero, Corea del Sur era el segundo país en el mundo más castigado por la pandemia, detrás de China. Sin embargo, el gobierno consiguió controlar la situación mediante campañas masivas de test y trazabilidad de las personas contagiadas.
PUBLICIDAD
Antes del nuevo brote, las reglas de distanciamiento social se habían aligerado en Corea del Sur. Algunos deportes profesionales, como el béisbol y el fútbol, comenzaron nuevas temporadas a principios de este mes, aunque a puerta cerrada. Los estudiantes también regresaron a las aulas la semana pasada.