El secretario de Educación, Eligio Hernández, defendió la decisión de la agencia de no reabrir los comedores escolares, alegando que se trata de un asunto de “estrategia”, pese a que no quiso explicar los criterios para determinar que las organizaciones sin fines de lucro, a quienes se les ha traspasado la responsabilidad, son la mejor alternativa para alimentar a la población de escasos recursos.
“Existen 23 métodos de lectura distinta. Cuál de ellos es mejor depende del contexto. En este momento la estrategia a utilizar por el Departamento de Educación y el gobierno de Puerto Rico no es abrir los comedores. (La estrategia es) en primera instancia, distribución o cocinar alimentos a través de autoridades independientes e invitando a organizaciones que puedan hacer el mismo trabajo. En segunda instancia, los que participan del programa Pacna (Programa de Alimentos para el Cuido de Niños y Adultos) que puedan continuar ofreciendo los servicios. Y tercero, a través de las organizaciones sin fines de lucro”, enumeró el secretario.
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“El resultado es lograr la alimentación. Yo puedo venir para el COE (Centro de Operaciones de Emergencia) por la autopista y salirme por la (carretera) número 1 o puedo venir de Caguas hacia acá o venir de San Juan hacia acá. Son estrategias, así que la estrategia seleccionada por el Departamento de Educación y el gobierno de Puerto Rico es la que acabo de mencionar”, agregó Hernández, quien, a pesar de la insistencia de los medios, en ningún momento ofreció razones concretas para justificar su decisión.
El secretario de Estado, Elmer Román, dejó la puerta abierta para reconsiderar la postura oficial, pero igualmente planteó que el cierre de comedores escolares es la determinación adecuada de acuerdo con la política pública del gobierno de evitar las aglomeraciones de personas.
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“Debido a que todavía estamos trabajando este proceso de llegar al pico (de contagios de Covid-19 la estrategia es tratar de mantener la mayor cantidad de personal posible en sus casas”, dijo.
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Sin embargo, la administración de la gobernadora Wanda Vázquez ha adelantado que se dispone a aceptar las recomendaciones de los ‘task forces’ asesores en economía y salud para reabrir paulatinamente la economía. Asimismo, entidades independientes, como el “Task Force del Pueblo”, han propuesto que se establezcan mecanismos para que los alimentos elaborados en comedores escolares sean recogidos por las familias estilo ‘servicarro’ o se entreguen en las casas de las personas necesitadas.
En la rueda de prensa, el secretario de Salud, Lorenzo González, reiteró su postura de que los comedores escolares, desde una perspectiva salubrista, podrían reabrirse de manera segura si Educación lo entendiera necesario.
Hernández insistió que los procesos que ha establecido la agencia no contravienen las normativas federales que regulan la obligación de las escuelas públicas de alimentar a sus estudiantes.
Reacciona a demanda
Hernández, por otro lado, señaló que todavía no ha sido emplazado, por el tribunal ante la demanda que presentó un grupo de madres y organizaciones que buscan que se ordene a Educación reanudar el programa de comedores escolares.
“No podemos pronunciarnos sobre el particular. Queda a discreción del honorable tribunal examinar los méritos de lo que se está argumentando”, se limitó a responder el titular de la agencia.
Hernández negó que entre los productos donados o entregados por el Departamento de Educación se encuentren productos expirados, como denunció ayer el chef Iván Clemente en un programa televisivo.
“El Departamento de Educación no tiene ningún reclamo de haber otorgado alimentos expirados”, aseguró el secretario.
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