Las monjas del Convento de San Leandro en Sevilla, España, tomaron un descanso de coser máscaras faciales COVID-19 para jugar un partido de baloncesto en su patio el 13 de abril.
Alejandro Ávila Villares publicó las imágenes del juego en Instagram, y le contó a Storyful : “Tras ser golpeado por esta terrible pandemia, fue una verdadera alegría ver a estas enfermeras jugando felices en su propia casa, el convento”.
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Las monjas del Convento de San Leandro son conocidas por sus dulces característicos, yemas de San Leandro, una pepita con forma de galleta. Sin embargo, la pandemia de Covid-19 terminó con la demanda de los productos, y las monjas redirigieron su energía a coser máscaras faciales.
Según un artículo de Villares, el convento había creado y distribuido más de 5 mil máscaras COVID-19.
