Crece la urgencia ante amenaza de coronavirus

Un día después de que la Organización Mundial de la Salud describiera la crisis del coronavirus a nivel mundial como una pandemia, la gobernadora Wanda Vázquez decretó un estado de emergencia en Puerto Rico ante la situación provocada por los casos sospechosos de esta enfermedad, que al cierre de esta edición ascendían a 16, según datos oficiales.

Además de activar a la Guardia Nacional, Vázquez ordenó que se cancelen o pospongan eventos multitudinarios, como conciertos, verbenas y eventos deportivos, hasta el 31 de marzo. Por otro lado, autorizó que licencias y marbetes que expiren en marzo puedan utilizarse hasta el 30 de abril sin penalidad.

La fecha límite para la radicación de planillas individuales se pospuso para el 15 de mayo. Las clases en el sistema público no se han cancelado.

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De los 16 casos sospechosos de contagio con el COVID-19 —nombre oficial de esta cepa de coronavirus—, seis se han reportado en el Hospital de Veteranos, que se indicó que son manejados por autoridades federales y no por el Departamento de Salud.

Entre los restantes 10, a cinco pacientes se les realizó la prueba de coronavirus, las cuales fueron enviadas a la sede del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) en Atlanta, mientras que cinco están a la espera del examen.

A pesar de múltiples gestiones, al cierre de esta edición la Oficina de Epidemiología, dirigida por Carmen Deseda, no había suministrado un desglose con la edad, género, procedencia y síntomas de los pacientes sospechosos de contagio.

En conferencia de prensa, Vázquez catalogó de “inaceptable”, tanto que el CDC no haya reportado los resultados de las cinco pruebas como que los kits para poder realizar las pruebas en la isla no hayan llegado. Sostuvo que el CDC se comprometió a entregar a más tardar hoy los resultados de la mujer italiana y su esposo, que llegaron en crucero a la isla el pasado domingo.

“Si al cabo de 48 horas no han actuado, entonces tomaremos las acciones correspondientes”, agregó Vázquez, sin entrar en detalles.

El secretario de Salud, Rafael Rodríguez Mercado, precisó que ayer el laboratorio del Dengue Branch en Puerto Rico, perteneciente al CDC, suministraría al laboratorio del Departamento de Salud los reactivos que se necesitan para procesar las muestras para detectar el coronavirus. Dijo que la expectativa es que entre hoy y mañana la agencia pueda comenzar a analizar las muestras.

A pesar de que se desconocen los resultados de todas las prueba de coronavirus, la gobernadora y los principales funcionarios del sistema de salud insistieron en el discurso de que no se ha registrado ningún positivo.

Deseda, incluso, aseguró que Puerto Rico es una jurisdicción de “bajo riesgo” de infecciones de coronavirus al compararse con otras en los Estados Unidos.

Mayor alerta

De confirmarse algún caso de coronavirus, el nivel de alerta que mantiene el gobierno se elevaría de 3 a 2.

“Es importante también quizás volver a reevaluar estrategias de intervenciones no farmacológicas, entiéndase distanciamiento social, seguir monitoreando puertos de entrada, la desinfección de áreas y monitoreo de servicios médicos por cualquier sobrecarga que pudiéramos tener”, explicó la directora de la Oficina de Bioseguridad, Jéssica Cabrera.

Vázquez, dejó la puerta abierta a nuevas solicitudes de fondos de emergencia a la Junta de Control Fiscal. La pasada semana, el organismo autorizó el uso de $5 millones para enfrentar un posible brote, aunque la mandataria no precisó cuánto se ha utilizado.

Durante la conferencia, la gobernadora anunció que el servicio de lanchas hacia Vieques y Culebra estará limitado a los residentes de las islas municipio.

Asimismo, insistió en su exhortación a patronos del sector privado a no cargar a las licencias de enfermedad los días que sus empleados opten por ausentarse para evitar el contagio con coronavirus, pese a admitir que su llamado no tiene fuerza de ley.

El periodista SADOT SANTANA COLABORó en esta historia