El presidente del Negociado de Energía, Edison Avilés, rechazó ayer que la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE) pueda aumentar la tarifa de energía eléctrica a los consumidores sin el consentimiento de la entidad reguladora. Indicó, además, que resulta muy “prematuro” determinar si los costos por combustible tras la emergencia provocada por los terremotos tendrán un efecto en la factura de los consumidores.
El lunes pasado, Daniel Hernández, director de generación de la AEE, dejó entrever que podría surgir un aumento en la factura de los consumidores debido a los gastos en que han incurrido por la generación de energía con la flota de emergencia. Sin embargo, el funcionario espera poder financiar esos costos con los fondos que podrían recibir de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencia (FEMA, por sus siglas en inglés). “Aquí la intención es que sea transparente lo que está pasando para nuestros clientes y que no ocurra un aumento en lo que serían los costos energéticos…Haremos todo el esfuerzo para evitar que haya un aumento”, dijo en aquel momento, Hernández.
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La preocupación de un alza tarifaria surgió durante las vistas del Negociado de Energía en las que se discute el Plan Integrado de Recursos (PIR), luego de que la representación legal de la Oficina Independiente para la Protección del Consumidor (OIPC) cuestionó a los representantes de la AEE si los costos por compra de combustible tras la emergencia podrían impactar adversamente la factura de los consumidores.
Avilés intervino y comentó que la AEE no puede alterar la tarifa de la energía eléctrica de manera unilateral, y el proceso de reconciliación por compra de combustible es un proceso que se dilucida cada tres meses.
“Al día de hoy todavía no hemos iniciado el proceso de reconciliación de los meses de diciembre, enero y febrero. Por lo tanto, es prematuro decir qué efecto va a tener eso”, sostuvo.
Agregó que el último proceso de reconciliación culminó en que el Negociado le ordenó a la AEE devolver $15 millones a los consumidores a diferencia de un incremento de $140 millones que la corporación pública solicitó por reconciliación en compra de combustible.
“Dicho eso, que el pueblo esté tranquilo, al día de hoy no se puede hablar de un aumento de tarifa, ni al día de hoy se puede hablar de un aumento… a raíz del terremoto”, expuso.