La bebé manatí rescatada ayer, viernes, en un caño del centro urbano, tributario del Río Grande de Loíza, se encuentra en buen estado, recibiendo los cuidados expertos de la Red Caribeña de Varamientos y del Centro de Conservación de Manatíes, informó la alcaldesa de Loíza, Julia Nazario Fuentes.
“Esta mañana conversé con el Dr. Antonio Mignucci, director del Centro y me informó que la bebé pasó la noche nadando y descansando. Ya no hay que sostenerla en el agua, lo que es una buena señal. Ellos continúan hidratándola oralmente con electrolitos y leche marca Elecare. Ella continuará bajo observación continua”, detalló la alcaldesa, quien estuvo presente ayer en el proceso de rescate del mamífero marino, una especie en peligro de extinción.
La pequeña manatí, que solamente pesa 50 libras y mide casi 4 pies, se estima que lleva poco más de una semana de nacida. Según lo establece el protocolo, el animal debe ser estabilizado, en primera instancia.
Cuidar a un individuo de esta especie, hasta que se pueda valer por sí solo, es sumamente costoso. Dicho proceso para estabilizar y alimentar un manatí tarda cerca de tres años, esto hasta que tenga el peso y salud adecuados para regresar al mar y puede costar acerca a los $100,000.
El Centro de Conservación de Manatíes estará aceptando aportaciones monetarias y donativos de la fórmula alimenticia Elecare. Los interesados pueden ayudar a través de ATH móvil al 787-400-2783 con la identificación #bebémanatí.
