Los días libres que el Gobierno concede a los empleados sin cargo a licencia de vacaciones —como ocurre hoy— tienen un impacto mínimo en las finanzas públicas, a juicio del economista José Alameda.
“Puede haber cierto ahorro, algún ahorro en (el costo de) energía, quizás. Pero si no se carga el día (a la licencia de vacaciones de los empleados), se convierte en un gasto fijo”, dijo Alameda.
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“También podría haber menos gente en la carretera, pero (hoy), como quiera, va a haber gente porque van a estar comprando, metidos en los shoppings, porque comienza la Navidad. En términos de impacto social (el día libre), no va a ser gran cosa”, anticipó el experto.
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Alameda sí reconoció que los comercios se podrán beneficiar significativamente del llamado Viernes Negro, particularmente considerando que el Gobierno emitió el pago del bono de Navidad el pasado miércoles. No obstante, advirtió de los peligros que representa para la economía noticias como la cancelación en la llegada de cruceros y la potencial eliminación —a partir de 2020— de la exención contributiva federal de la que disfrutan las empresas que operan como corporaciones de control foráneo.
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En ese sentido, esta época navideña “es como el último round antes del nocaut”.
“Antes la gente decía: ‘Por qué tantos días de fiesta’. Pero lo que pasa es que, en los días de fiesta, la gente compra, genera actividad económica. Siempre hay pros y contras, pero yo creo que es más positivo que negativo”, resumió Alameda.
