Una demanda interpuesta contra Southwest Airlines por parte de un miembro de la tripulación alega que los pilotos de un vuelo realizado en 2017 estaban viendo un video transmitido en vivo en un iPad de una cámara escondida en el baño de uno de los aviones de la aerolínea.
Southwest respondió el sábado y negó que haya colocado cámaras en los sanitarios de las aeronaves y señaló que el incidente de 2017 fue un “intento inapropiado de humor” que no es tolerado por la compañía.
La querella alega que la azafata Renee Steinaker vio un video en un iPad que era transmitido desde el baño de la proa del avión cuando entró a la cabina para ser la segunda persona requerida ahí cuando el piloto salió para usar el sanitario aproximadamente dos horas y media después de haber despegado en un vuelo del 27 de febrero de 2017, de Phoenix con destino a Pittsburgh.
Steinaker vio al piloto en el video y el copiloto con “una expresión de pánico en su rostro” reconoció que el video en el iPad era grabado con una cámara escondida en el baño, pero le comentó que era una “nueva medida de seguridad que era confidencial y que había sido instalada en todos los aviones Boeing 737-800 de Southwest”, de acuerdo con la demanda.
La azafata tomó una fotografía del video, que proporcionó en un reporte a la administración de Southwest y un supervisor le advirtió que no le contara a nadie el incidente, señala la demanda.
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De acuerdo con la querella, a Steinaker le advirtieron: “Si esto se hace público, si esto se hizo público, nadie, quiero decir nadie, volvería a volar en nuestra aerolínea”.
Los dos pilotos han negado las acusaciones y Southwest emitió un comunicado el sábado en el que rechazó colocar cámaras en los sanitarios de sus aviones.