Mundo

Rescatistas en Bahamas enfrentan la devastación de Dorian

Dorian arrasó con las islas de Ábaco y Gran Bahama

PUBLICIDAD

FREEPORT, Bahamas — Los equipos de rescate en las Bahamas se abrieron paso el miércoles entre casas destruidas e inundadas, tratando de llegar a víctimas empapadas y aturdidas por el paso del huracán Dorian y evaluar en su totalidad la magnitud de la catástrofe. El número oficial de muertos era de siete, pero seguramente aumentará.

Un día después de que el huracán más poderoso que jamás haya azotado el país terminara de atacar las islas de Ábaco y Gran Bahama, los socorristas todavía no habían llegado a algunas de las zonas más afectadas.

PUBLICIDAD

“Ahora mismo hay muchas incógnitas”, dijo Iram Lewis, un miembro del Parlamento. “Necesitamos ayuda”, agregó.

Dorian, mientras tanto, avanzaba por el Atlántico hacia el norte, en paralelo a la costa de Florida, con vientos reducidos pero aún peligrosos de 165 km/h (105 mph) en un recorrido que podría llevarlo a Georgia y las Carolinas. Se advirtió a unos 3 millones de personas en los cuatro estados que desalojaran la zona, y las carreteras que conducen hacia el interior se convirtieron en rutas de evacuación de un solo sentido.

El huracán se estacionó sobre las Bahamas durante más de un día y medio, con vientos de hasta 295 km/h (185 mph) y lluvias torrenciales, inundando los vecindarios con aguas turbias de color marrón y destruyendo o dañando gravemente miles de sus viviendas.

PUBLICIDAD

“Estamos en medio de una de las mayores crisis nacionales de la historia de nuestro país”, dijo el primer ministro Hubert Minnis. Dijo temer que el número de muertos aumente.

Los rescatistas en Bahamas usaron motos acuáticas, botes y hasta una excavadora para llegar a los niños y adultos atrapados por las crecidas, mientras la Guardia Costera estadounidense, la Marina británica y un puñado de grupos humanitarios trataban de llevar alimentos y medicinas a los sobrevivientes y de llevar a la gente más necesitada a lugares seguros.

Cinco helicópteros de la Guardia Costera volaban casi cada hora a la maltrecha Ábaco y evacuaron a más de 20 heridos al principal hospital de la capital, Nassau.

En las Bahamas, el portavoz de la Cruz Roja Matthew Cochrane dijo que se cree que más de 13.000 viviendas, alrededor del 45% de las residencias en Gran Bahama y Ábaco, sufrieron daños severos o quedaron destruidas por completo.

Funcionarios de las Naciones Unidas indicaron que se necesitarán alimentos para más de 60.000 personas en las islas, mientras que la Cruz Roja señaló que unos 62.000 residentes requerirán agua potable.

“Es una devastación total. Está diezmado. Apocalíptico”, dijo Lia Head-Rigby, que ayuda a dirigir un grupo de socorro en caso de huracán y que sobrevoló Abaco. “No es reconstruir algo que estaba allí. Tenemos que empezar de nuevo”.

Ella precisó que su representante en Ábaco le dijo que había “muchos más muertos”.

Siendo las 8 de la mañana del miércoles, el ojo de Dorian se encontraba a unos 144 kilómetros (95 millas) al noreste de Daytona Beach, Florida, y avanzaba hacia el noroeste a 13 kilómetros (8 millas) por hora. Los vientos huracanados se extendían hasta 95 kilómetros (60 millas) desde su centro.

En las costas de Georgia y las Carolinas se emitieron avisos de evacuación para más de 2 millones de personas, mientras prácticamente había desaparecido la amenaza de un impacto directo a Florida. Los meteorólogos dijeron que el vórtice de Dorian pasará peligrosamente cerca de Georgia y que posiblemente toque tierra en las Carolinas el jueves o viernes.

“No se arriesguen. Salgan de ahí”, pidió Carlos Castillo, funcionario de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias.

Con una amenaza reducida para Florida y el peligro desplazándose hacia el norte, el aeropuerto de Orlando, el más concurrido del estado, reanudó sus operaciones después de haber estado cerrado por más de un día debido a la cercanía de Dorian.

Las autoridades informaron que el Aeropuerto Internacional de Orlando reanudó sus actividades comerciales el miércoles al mediodía. Los vuelos de entrada y salida del aeropuerto se interrumpieron el martes por la mañana en previsión del huracán.

Mientras tanto, los parques temáticos de Orlando volvieron en su mayor parte a su horario normal de funcionamiento.

Walt Disney World y Universal Orlando Resort abrieron por un día completo el miércoles después de haber cerrado temprano el martes. SeaWorld Orlando estaba reabriendo a media mañana del miércoles después de estar cerrado todo el martes.

PUBLICIDAD

Tags

Lo Último