Con motivo del inicio de clases en la isla, la administradora de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (ASSMCA), Suzanne Roig Fuertes, orientó hoy a los padres sobre el comportamiento que pueden manifestar sus hijos durante el regreso a la escuela luego del receso de verano.
“Por lo general, en las vacaciones de verano la rutina de los niños se trastoca. Suelen desligarse de sus tareas escolares, así como de las rutinas cotidianas tales como comer, horarios de estudio y de acostarse y levantarse. También, disponen de mayor tiempo libre para pasear y compartir con los amigos. Sin embargo, cuando finaliza ese receso de verano y llega el momento de regresar a su rutina diaria, incluyendo cumplir con sus deberes escolares, el proceso de adaptación puede convertirse en una tarea difícil”, reconoció la señora Roig.
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Ante esta realidad, la Titular de ASSMCA instó a padres o tutores a estar atentos a las reacciones o conductas que podrían presentarse en algunos niños provocadas por el regreso a clases, luego de disfrutar de sus vacaciones de verano.
“Entre las reacciones típicas podemos encontrar la renuencia para asistir a la escuela con algunas posibles manifestaciones tales como: malhumor, resistencia a colaborar en lo relacionado a la escuela y tomar más tiempo del adecuado al vestirse. También, quejas repentinas de malestares físicos o llanto, tristeza, falta de apetito, irritabilidad, extravío de libros y material escolar, entre otras”, expuso.
De acuerdo con la funcionaria, es normal que a algunos niños se les haga más difícil que a otros regresar a su rutina. No obstante, a medida que pasan los días lograrán adaptarse. “Para que los padres puedan manejar este proceso es importante que previo a finalizar las vacaciones poco a poco vayan retomando parte de su rutina, en especial en términos de los horarios de comida y sueño”.
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Acto seguido, Roig Fuertes también recomendó paulatinamente reasignarles a sus hijos tareas del hogar que guarden relación con la escuela. “Por ejemplo, involúcrelo al momento de la compra de algún artículo escolar. Tome en consideración su opinión. Permítale, bajo su supervisión, escoger la merienda. Calendaricen juntos las actividades extracurriculares como las prácticas deportivas o clases de música o baile. Regule el uso del televisor, las visitas a los amigos, y el disfrute de juegos electrónicos. Pero no pierda de vista que siempre el niño debe participar de este proceso y los padres tienen el deber de explicarles a qué se deben estos cambios”.
Otras sugerencias brindadas por la Administradora de ASSMCA incluye el exhortar a sus hijos a contactarse con amigos de la escuela que no vieron durante el receso de verano, conversar con los niños sobre el regreso a clases y escuchar sus preocupaciones.
De igual forma, planifique y prepare junto a su hijo un lugar específico en la casa donde puedan leer y realizar las tareas sin la interferencia de algún radio, televisor u otra distracción.
Además, es importante que los padres asuman una actitud positiva y eviten quejarse frente a los niños sobre lo que implica el fin de las vacaciones. “Los niños absorben todo como las esponjas y tienden a imitar el comportamiento de los padres. Por lo tanto, escuchar a mamá o papá lamentarse porque el regreso a la rutina conlleva madrugar, mayor carga de trabajo, estudiar en las tardes, entre otras responsabilidades, puede provocar en el menor poco o ningún interés en que terminen esos días de vacaciones”, dijo la señora Roig.
Finalmente, Roig Fuertes les recalcó a los padres la importancia de mantener una comunicación directa con sus hijos y estar al pendiente de su comportamiento por si presenta algún cambio que amerite la intervención de un profesional de la conducta humana.
“En ASSMCA contamos con varios programas de servicios dirigidos a la población infantil. De necesitar mayor información o aclarar dudas puede llamar a la Línea PAS al 1-800-981-0023”, expresó.