Poco antes del 22 de julio, cuando el presidente del Senado Thomas Rivera Schatz asumió la presidencia del Partido Nuevo Progresista (PNP) tras la dimisión de Ricardo Roselló Nevares, se comenzaba a cuajar en las redes sociales una campaña a favor del “tiburón blanco” con la etiqueta #OrdenyDirección.
Con esa misma expresión, la senadora del Distrito de Bayamón, Migdalia Padilla Alvelo, se unió a los sectores que apoyaron al presidente senatorial para ocupar la secretaría de Estado y subsecuentemente la gobernación una vez la silla de Rosselló Nevares quede vacía el viernes, 2 de agosto, a las 5:00 de la tarde.
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“Sé de tu compromiso con Puerto Rico y el mejor deseo de esperanza, que todos queremos. Estamos listos para juntos poner #OrdenyDirección para un mejor País”, publicó cerca del mediodía.
Pero no fue la primera. El senador Nelson Cruz Santiago se le adelantó en la mañana con una carta al todavía primer mandatario para que “antes de su dimisión deje en buenas manos al País, siendo esas buenas manos las del Presidente del Senado”. “Es la única persona que tiene un compromiso basado en el consenso”, sugirió el senador del distrito cinco (Ponce).
El lunes, el representante Jorge “Georgie” Navarro hizo lo propio, siguiéndole el paso al Sindicato de Bomberos Unidos de Puerto Rico y el Sindicato de Policías Puertorriqueños, los primeros en expresarse.
A esta lista se añadieron el senador y aspirante a la alcaldía de San Juan, Miguel Romero, los senadores Nayda Venegas y Carlos Rodríguez Mateo, la alcaldesa de Canóvanas Lornna Soto, y la Corporación para la Defensa del Poseedor de Licencias de Armas de Puerto Rico (CODEPOLA).
La lista sigue creciendo. Rivera Schatz, en cambio, no ha confirmado públicamente su interés o si es una de las cartas que se barajan al interior del PNP. Mientras tanto, en Fortaleza continúa el hermetismo.
