El proyecto de control de inundaciones en la intersección de las carreteras PR-3, PR-53 y PR-194, en el municipio de Fajardo, entra el martes en su fase final, lo que proveerá una solución permanente al problema de inundaciones y un alivio al tráfico.
Así lo informaron en declaraciones escritas el secretario del Departamento de Transportación y Obras Públicas (DTOP), Carlos Contreras Aponte y la directora ejecutiva de la Autoridad de Carreteras y Transportación (ACT), Rosana Aguilar Zapata.
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Detallaron que la mañana del martes reabrirán los carriles de la intersección entre la PR-3 y la PR-53, lo que beneficiará a miles de conductores que transitan por estas carreteras, más directamente a los residentes de los municipios de Fajardo, Luquillo y Ceiba, y las comunidades de Río Arriba, Demajagua, Naranjo, Florencia, Quebrada Vueltas, Barrio Pueblo, Quebrada Fajardo, Sardinera y Cabezas.
“Por demasiados años estas carreteras se vieron afectadas por las constantes inundaciones, cada vez que las lluvias provocaban que las aguas del Río Fajardo arroparan estas intersecciones. En el 2012 se comenzaron los trabajos para resolver este problema, pero no fue hasta ahora que se logró un avance. Por fin, estamos en la fase final” manifestó Contreras Aponte.
Por su parte, la directora ejecutiva de la ACT explicó que “en este proyecto se realizaron trabajos de elevación de la rasante de la carretera en la intersección de la PR-3, PR-53 y PR-194. Se construyeron dos muros de gravedad en la PR-53. Mejoras al sistema de drenaje y alumbrado del proyecto y rotulación e instalación de barreras de seguridad de metal galvanizado, entre otros trabajos misceláneos”.
“Durante estas primeras etapas, el proyecto creó alrededor de 450 empleos directos,” añadió.
Por su parte, el presidente de la Cámara de Representantes y representante por el Distrito 36, Carlos “Johnny” Méndez Núñez, dijo que “la falta de estos carriles ha causado muchos inconvenientes. Pero ya este proyecto se va a terminar. Estoy confiado que dicha terminación redundará en un despunte económico, particularmente en el turismo, para los pueblos de Fajardo, Ceiba y Naguabo, entre otros. Continuaremos identificando áreas para mejorar la infraestructura vial de la región”.