Las bases de datos de licencias de conducir se han convertido en una fuente de vigilancia para el Buró Federal de Investigaciones (FBI) y la agencia de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés) según reveló hoy el periódico de Washington Post y el Centro para la Privacidad y Tecnología de la Universidad de Georgetown.
De acuerdo a la publicación, ambas agencias escanean las licencias de conducir con tecnoligía de reconocimiento facial sin el conocimiento y consentimiento de los ciudadanos.
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“Miles de peticiones de reconocimiento facial, documentos internos y correos electrónicos sobre los pasados cinco años, obtenidos a través de peticiones de acceso a la información por investigadores de Georgetown y entregados al Washington Post, revelaron que investigadores federakes han cinvertido las bases de datos de los estados sobre vehículos de motor en una infraestructura de vigilancia sin presentes”, destacó el periódico.
Los récords de licencia de los residentes de los estados y territorios poseen la foto de miles de personas que no necesariamente han cometido crímenes, resalta el Post.
De acuerdo al diario, ninguna legislatura municipal ni el Congreso han autorizado el desarrollo de dicho sistema.