Ecuador no tomó ninguna decisión para echar a Julian Assange de la embajada del país en Londres, pese a los tuits de WikiLeaks que reportaron que, según fuentes, podría ser expulsado en cuestión de “horas o días”, explicó un alto cargo ecuatoriano.
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Un pequeño grupo de manifestantes y simpatizantes del fundador de WikiLeaks se congregaron el jueves en el exterior de la legación diplomática en la capital británica, donde Assange lleva recluido desde agosto de 2012. Teme ser extraditado a Estados Unidos luego de que WikiLeaks publicó miles de cables militares y diplomáticos clasificados.
En otro mensaje en la red social, agregó que había recibió una segunda confirmación por parte de otra fuente de alto rango.
El Ministerio de Exteriores de Ecuador señaló en un comunicado que “no comenta rumores, teorías o conjeturas que no tienen ningún respaldo documental”.
Moreno vs. Assange
Más tarde, un alto funcionario señaló que aunque el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, estaba molesto por el aparente hackeo de sus comunicaciones personales, negó la denuncia de WikiLeaks y afirmó que no se decidió expulsar a Assange de la embajada. La fuente habló bajo condición de anonimato porque no estaba autorizada a discutir el asunto.
El martes, Moreno culpó a WikiLeaks de las recientes acusaciones de corrupción en el extranjero aparecidas en medios locales y de la publicación de fotos familiares en redes sociales.
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El mandatario acusó a WikiLeaks de interceptar llamados telefónicos y conversaciones privadas además de “fotos de mi cuarto, de lo que como, y de cómo bailan mi esposa, mis hijas y mis amigos”.
Moreno no aportó pruebas pero su discurso reflejó la tensión existente entre Assange y sus anfitriones en Londres.
Por su parte, WikiLeaks calificó las acusaciones del mandatario de “completamente falsas” en un comunicado, y dijo que reportó las supuestas denuncias de corrupción contra Moreno solo después de una investigación en el parlamento.
El equipo de defensa de Assange sugirió en Twitter que Moreno estaba intentando utilizar el escándalo para presionar al fundador de WikiLeaks.