DENVER (AP) — El río Colorado tuvo este verano un caudal menor al previsto debido a la sequía, lo que aumenta las probabilidades de un déficit en este sistema fluvial en el 2020, dijeron el viernes funcionarios federales.
La Oficina de Recuperación del Departamento del Interior dijo que las probabilidades de una insuficiencia en el lago Mead, el embalse más grande del río, son ahora de 57%, comparadas con el 52% proyectado en mayo.
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El río y sus afluentes benefician a 40 millones de personas y a 16.300 kilómetros cuadrados (6.300 millas cuadradas) de tierras agrícolas en México y los estados norteamericanos de Arizona, California, Colorado, Nevada, Nuevo México, Wyoming y Utah.
Una sequía de casi dos años, junto con el aumento en la demanda de agua en las ciudades, ha reducido la cantidad de agua disponible en el Lago Mead y en el otro gran embalse del río, el lago Powell.
Si la superficie del lago Mead baja a menos de 330 metros (1.075 pies) sobre el nivel del mar, se reduciría la liberación de agua de acuerdo a los convenios que rigen el sistema. Arizona, Nevada y México serían los primeros en ver reducidos sus volúmenes en caso de déficit.
Jamás se ha registrado déficit en el río.
“Existe un verdadero sentido de urgencia en toda la cuenca para proteger el suministro del río debido al incremento en la demanda y la actual sequía”, declaró Brenda Burman, titular de la Oficina de Recuperación.
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El pronóstico empeoró debido a que el lago Powell, que está río arriba respecto del lago Mead, captó entre abril y julio unos 600 millones de metros cúbicos (500.000 acres-pie) menos agua de lo previsto, dijo Patti Aaron, portavoz de la oficina. Un acre-pie (1.200 metros cúbicos) es suficiente para abastecer a una familia típica durante un año en Estados Unidos.
Lo anterior significa que Powell estará 1,5 metros (5 acres) más abajo de lo previsto y tendrá menos agua disponible para descargarla al lago Mead.
